¡Cuánta cara, Laracospe y Cospelara!

Entre la teletienda de Dolores de Cospedal y el autobombo de Nemesio de Lara mientras felicita la Navidad con dinero público en los medios de comunicación afines (anuncio escuchado entre escozores y dentera en la cadena SER) uno no sabe qué político es más indecoroso. Calificarles como descarados no es apropiado porque es un término demasiado contaminado semánticamente por una ciudadanía cuyo nivel de tolerancia a la desfachatez de sus representantes ha sido sobrepasado con creces. Sería más acertado calificarles de impudorosos-narcisistas o, sencillamente, egocéntricos. Aún habría un término que les definiría mejor: mentecatos, cuya etimología proviene del latín mente captus, y significa “cogido de la mente” en el sentido de “mente robada”.

“¡Feliz Navidad desde la diputación más saneada de España” -proclama ajeno al buen gusto de la modestia el uno-. “¡Compra queso en un momento tan entrañable como la Navidad!” -exclama la otra publicitándose a sí misma más que a los productos manchegos-. “¡Mentecatos!” -susurro impotente para mis adentros-.

De Cospedal y De Lara tienen las mentes cautivas, alienadas, sometidas a sus respectivos y pantagruélicos egos. Bien es cierto que desconozco personalmente a ambos gerifaltes y que a buen seguro serán bellísimas personas en las distancias cortas, pero de lo que emanan sus mensajes y sus modales se deduce una gran mentecatería.

Si Ciudad Real fuera próspera ellos serían los caudillos del ciudadrealismo porque, como todo nacionalismo, tendría su momento culminante en los egos, previo recorrido como guías de la tribu y presidentes del bloque de vecinos. Se sirven del anuncio de quesos o de la felicitación navideña para dar rienda suelta a sus pulsiones ególatras, utilizan al vino manchego y a la Navidad como meros pretextos que catalicen sus delirios. Más que políticos (¡qué bella palabra tan ensuciada!) parecen dos cantantes de opereta, el uno con barba y la otra con peineta.

Que Laracospe y Cospelara se centren en gestionar. Que, al menos, no importunen con sus ocurrencias y autobombo. Bastante tenemos con sobrellevar las consecuencias de sus gestiones fallidas. Ahora, más que nunca, necesitamos políticos sencillos capaces de resolver problemas complejos.

http://www.rafaelrobles.com

@RafaelRob

Relacionados

1 COMENTARIO

Responder a Luis Mario Cancelar comentario

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img