La Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras ha denunciado de nuevo la actuación de la Consejería de Agricultura «concretada en el cierre de laboratorios y traslado indiscriminado de equipos y de servicios, despreciando a los trabajadores públicos y a sus representantes al no respetar la regulación laboral mínima y precarizando el servicio público». Es el caso, dice el sindicato, del desmantelamiento, «casi por la fuerza bruta», del laboratorio de Genética Molecular animal (CERSYRA) de Valdepeñas, entre otros.
El sindicato relata que «primero fueron los laboratorios de Albaladejito en Cuenca y de El Chaparrillo en Ciudad Real, y ahora es el laboratorio de Genética Molecular animal del CERSYRA de Valdepeñas, amén del expolio de equipos del IVICAM de Tomelloso».
CCOO sostiene que «se desmantelan los laboratorios públicos de referencia regional y estatal, y cercanos a agricultores y ganaderos, para crear un laboratorio central de técnicas de procesos moleculares en Talavera de la Reina que ahora se traslada inesperadamente a Toledo». «Su nuevo gestor -prosigue- es la empresa pública de gestión medioambiental, GEACAM, vaciada de personal por la señora Soriano: más de 2.000 despidos vistos para sentencia y un nuevo expediente de regulación de empleo de 83 personas del Área de Asistencias Técnicas y Estructuras, algunos de ellos veterinarios».
«Sin embargo», prosigue el sindicato con su relato, «GEACAM contratará a una persona licenciada en veterinaria especialista en enfermedades infecciosas y epidemiología para trabajo en gabinete, con un perfil muy especifico en técnicas moleculares. Tendrá a su disposición todo el equipamiento público de la Consejería obtenido casi por la fuerza bruta, interponiendo entre la Administración y los trabajadores a una empresa de mudanza que actúa por orden del Responsable de Área de Calidad e Impacto Ambiental (sin cometido en estos centros) y que, como ejemplo el día 11 de marzo, vació de material, equipos y protocolos técnicos del laboratorio de genética del CERSYRA (Centro Regional de Selección y Reproducción Animal) sin mediar palabra, con la complacencia del director del centro, y en presencia de los trabajadores estupefactos por el espectáculo de cómo desaparecía por la puerta todo el trabajo y los años de experiencia sin una explicación razonable ni inventario que garantice que los aparatos expoliados no caigan en manos privadas. Hay indicios, además, de que alguno de los costosos aparatos pueda haber sufrido daños en el traslado».
El CERSYRA de Valdepeñas es el único Laboratorio Oficial de Genética Animal de Castilla-La Mancha, y el único laboratorio público de la Región competente para efectuar con carácter y validez oficiales los análisis de los marcadores genéticos para la identificación y control de filiación de los animales y, en su caso, la determinación de los genes vinculados a la mejora de la producción animal y a la transmisión de enfermedades, así como la detección de anomalías cromosómicas de interés productivo. Analiza 7.000 muestras al año.
Entre los objetos «expoliados» en el CERSYRA, CCOO se ha referido a dos secuenciadores de ADN, valorados en 120.000 euros cada uno; dos termocicladores valorados en 9.000 euros cada uno; y un extractor de ADN, valorado en 35.000 euros.
«Asistimos de nuevo, a otro desmantelamiento de un servicio público, en este caso con el agravante de no dar ninguna explicación ni a los trabajadores ni a sus representantes y nos preguntamos por las razones que puede haber detrás de un cierre tan inesperado como apresurado y absurdo», subraya CCOO, que advierte de que «los trabajadores, dos funcionarios y tres laborales, llevan una semana sin contenido en sus puestos de trabajo, al haber desaparecido todos los medios con los que venían desempeñando su trabajo».
«El primer Laboratorio oficial de genética animal de Castilla la Mancha es actualmente un erial, con los trabajadores y trabajadoras sin cometido y con la inadmisible incertidumbre de no conocer su destino final. Lo que sí se mantiene es el cartel anunciador del centro: la Junta sigue aparentando lo que ya no es», señala CCOO.
Idéntico «modus operandi» que en el IVICAM
El sindicato sostiene que «idéntico modus operandi” se utilizó en el Laboratorio del IVICAM de Tomelloso (Instituto de la Vid y el Vino de Castila La Mancha):
Siempre según el sindicato, el día 27 de febrero se presentó a una inspección ocular funcionarios de la Junta, entre ellos el Responsable de Área de Calidad e Impacto Ambiental, incompetente en estos centros. El 4 de marzo, cuando no se encontraba el jefe de servicio de investigación en el laboratorio del IVICAM, por permiso de cuatro días, se procede al vaciado del laboratorio ( pipetas, balanzas, instrumental de laboratorio, microscopios, mobiliario en general, manuscritos técnicos de los investigadores y hasta el material fungible y material desechable) sin proceder a un inventario exhaustivo y preceptivo.
«Entre el material expoliado, alguno financiado con Fondos Europeos, se encuentra un espectrofotómetro de absorción atómica de llama para comprobar la presencia de elementos como el Calcio (Ca), Sodio (Na), Potasio (K); espectrofotómetro de absorción atómica con cámara de grafito para controlar la ausencia de metales pesados como el Plomo (Pb), Cadmio (Cd), Mercurio (Hg) en los vinos de Castilla- La Mancha; y todo el material de repuesto y lámparas de los equipos.
«Estos aparatos, cuya finalidad es exclusiva para la investigación de vinos y de carácter finalista para el IVICAM, y sólo para él, han sido trasladados a una ubicación incierta», dice el sindicato, que asegura que «actualmente, por falta de equipos, desde el IVICAM ha de enviarse las muestras de análisis de vinos a Toledo, para determinar su composición química, por transporte urgente convencional, al precio de 7 euros por paquete (máximo 10 muestras por paquete).
