Rosa Romero, por hablar que no quede

Manuel Artiñano Moraga. Concejal del Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Ciudad Real.- Desde hace más de una década, los distintos equipos de gobierno del PP en Ciudad Real, han venido anunciando la construcción del Centro Cívico Social de Los Rosales, a la que ya en su día el Consistorio se comprometió tras acuerdo con el gobierno de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha de entonces, por el que la Junta edificaba el Centro Social de Larache y el Ayuntamiento de Ciudad Real el Centro Cívico Social de Los Rosales.

Fiel a ese pacto, el Gobierno de Barreda cumplió con su compromiso haciendo realidad el Centro Social de Larache. Sin embargo a fecha de hoy, el gobierno local del PP en Ciudad Real, solamente ha puesto palabras para la construcción del Centro Cívico Social de Los Rosales.

Después de tantos años, Rosa Romero, alcaldesa de Ciudad Real, vuelve a anunciar las tan deseadas obras del Centro Social del barrio de los Rosales para el año 2014. Lo hace aprovechando las fiestas anuales de este barrio -residencia habitual de la regidora- y del hipotético inicio que (ya desde hace algunas semanas) de su campaña electoral para las próximas elecciones municipales del 2015.

Pero no es la única ocasión en la que se anuncia la construcción del referido centro cívico social, pues ya se han dado numerosas presentaciones de estas obras a través de los medios de comunicación. Y la última vez que lo hizo, fue en los meses anteriores a las elecciones municipales del 2011, donde Rosa Romero anunciaba por medio de su concejal delegado de Urbanismo Sr. Cañizares, el proyecto de construcción de este centro social, sin haberlo previamente informado a los vecinos y vecinas.

No es la única cháchara de Rosa Romero en los medios. También les recuerda a los vecinos la colaboración del Ayuntamiento, mediante la cesión de medios técnicos y humanos necesarios, en el desarrollo de esta celebración festiva. Como si el fomento de las relaciones vecinales y la vida social de la comunidad residencial concerniera en exclusividad al tejido asociativo vecinal, al que por cierto, felicito.

Además, la alcaldesa hacía un repaso de todas las actuaciones realizadas en el Barrio de los Rosales: arreglo de calles, mobiliario público, mejora del alumbrado etc., nada coincidente con los testimonios de los vecinos y vecinas de este barrio, con los que el Grupo Municipal Socialista mantiene contacto permanente, y que opinan todo lo contrario: peor transporte con la restructuración del autobús urbano, con la eliminación de la línea 3, que ha complicado enormemente el desplazamiento de estudiantes y vecinos en general al centro de la ciudad y a los centros de enseñanza. Desde hace diecisiete años no han arreglado ni asfaltado las calles. Poca iluminación a pesar del gran número de puntos de luz, debido al ramaje de los árboles que impiden un alumbrado adecuado. Alcorques levantados por las raíces de los árboles. Incremento de la inseguridad en vecindario. Echan de menos al policía de barrio. Se preguntan para cuándo la segunda ronda. Echan en falta actividades lúdico-deportivas y culturales para niños, mayores o residentes en general. Y así, alguna que otra cuestión más, reveladora de la poca atención de Rosa Romero a los problemas de la ciudadanía.

¡Sra. Romero, no se exceda en su palabrería! No abuse de la buena voluntad y generosidad de un pueblo bueno, de una gente honesta y afable, como son los vecinos del Barrio de los Rosales. Por una vez en su gestión municipal, piense en el bien de los ciudadanos de Ciudad Real y no en su progresión política y bienestar particular.