Valdepeñas: El teatro de Francisco Nieva regresa al auditorio municipal

El teatro del dramaturgo valdepeñero Francisco Nieva regresa este viernes 8 de noviembre a las 21,00 horas al Teatro Auditorio Municipal de Valdepeñas con la obra ‘El rayo colgado y peste de loco amor’, un montaje de gran calidad dirigido por Juan Dolores Caballero y texto que incluye todos los ingredientes del mejor Nieva, la alucinación, la fantasía, la ceremonia, la crítica, la sátira a la España más negra y la recreación de un mundo mágico, que atrapa al público, lo fascina y lo sorprende.

Por tanto, Caballero da vida a un texto magnífico, difícil, complejo y lleno de matices, que el director exprime y ensalza con su visión fantástica del teatro, además de con su sorprendente puesta en escena a cargo de los actores y actrices Rafael Abenza, Pilar Laguna, Vicenc Miralles, Silvana Navas y Eduard Tovar.

Como en “El rey Perico y la dama tuerta”, “Las gracias mohosas”, y otros montajes del director, los personajes de “el chino” subliman la interpretación actoral y llegan a tomar vida propia, creando seres “de otro mundo”, que nos transportan a tiempos y espacios que no existen, que inventamos a medida que vamos escuchándoles, conociéndoles y dejándonos fascinar por la realidad que nos proponen.

Para la producción de una obra tan compleja, ha sido necesaria la colaboración de cuatro compañías nacionales como son La Cantera, Teatro El Velador de Sevilla y las compañías madrileñas Teatro Defondo y Morboria. Esta coproducción cuenta con la colaboración del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y la Música (INAEM) y el patrocinio de Bodegas Dionisos de Valdepeñas.

El precio de la entrada será de 5 € para estudiantes y 10 € para público general, pudiéndose adquirir en el Centro Cultural «La Confianza», en www.ccm.es, en el teléfono 902 405 902 y en la taquilla del teatro una hora antes de la representación.

Sinopsis

La obra se sitúa en el interior de un convento olvidado en el que viven unas monjas extrañas y un niño que se llama Porrerito, entre ángel y demonio, que tiene todo el convento sembrado de cartuchos de dinamita, robados a una obra de construcción de una carretera. Las monjas representan la vida que se alcanza a través de los sentidos y de la ilusión. Para ellas, el mundo se eleva por encima de lo lógico y busca el anhelo infinito de lo sublime.

Esta obra, una de las más significativas de Nieva, tanto por su temática como por la riqueza sorprendente de las imágenes y el barroquismo de su lenguaje, parte directamente de la biografía de Nieva, donde se reflejan muy bien los recuerdos de su infancia y la vida con sus dos tías abuelas, Teresa y Josefina Cejudo, con una interpretación de la religión muy particular, que inspira a las monjas protagonistas de la obra.

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