El consejero de Sanidad señala que el reinicio de las obras en los hospitales «ha devuelto la ilusión a los profesionales y ciudadanos de Castilla-La Mancha»

El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha explicado hoy en las Cortes Regionales la situación actual de las grandes infraestructuras sanitarias en la región, afirmando que el reinicio de las obras en los hospitales de la Comunidad “ha devuelto la ilusión a los profesionales y ciudadanos de Castilla-La Mancha».
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Fernández Sanz ha recordado cómo actualmente, la labor realizada por el Gobierno que preside Emiliano García-Page ha permitido la puesta en marcha de las obras en los hospitales de Toledo, Guadalajara, Albacete o Cuenca, así como el Plan Funcional del nuevo Hospital de Puertollano, en contraposición a la labor del anterior Ejecutivo que paralizó todas.

“Se paralizaron todo tipo de mejoras y nuevos proyectos en las infraestructuras hospitalarias de nuestra Sanidad Publica, sin tener en cuenta, ni el daño que esto suponía para la salud de los castellano manchegos, al no poder disponer de nuevos centros más modernos en los que ser tratados, ni las consecuencias económicas, con unas indemnizaciones a las empresas adjudicatarias que estamos haciendo frente en la actualidad”, ha afirmado el consejero.

“Esta explicación de los avances y mejoras que se están desarrollando en la construcción de las nuevas infraestructuras hospitalarias que está desarrollando el Gobierno regional de Castilla-La Mancha, debe confrontar, con las obras paralizadas y abandonadas que dejó el gobierno del Partido Popular durante cuatro años”, ha informado Fernández Sanz, explicando que eso ha supuesto un gasto extra a la hora de retomarlas y rehacer los planes funcionales, con el costo económico que esto supone, y deudas e indemnizaciones a las empresas adjudicatarias.

Así, ha señalado que “podemos hablar en la actualidad de un total estimado de 23 millones y medio de euros que tiene que afrontar el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha en cuanto a indemnizaciones y procesos judiciales abiertos”.

A todo ello, ha recordado el consejero, hay que unir el proyecto de privatización de cuatro hospitales como eran Villarrobledo, Tomelloso, Almansa y Manzanares por el Ejecutivo que presidía Cospedal y a los que el actual Gobierno tuvo que paralizar los expedientes de privatización.

Nuevos hospitales

El consejero de Sanidad ha explicado el proyecto del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, que enfrentó un periodo de suspensión de la obra entre septiembre de 2013 hasta agosto de 2016.

Entre las mejoras de este proyecto, y a partir de la ampliación de 35.618 metros cuadrados de obra nueva y 22.463 metros cuadrados de reforma en el edificio actual, lo que suma un total de 58.081 metros cuadrados de actuación en superficie hospitalaria, está la de modificar las prestaciones del actual Complejo Hospitalario.

Con ello se incrementará el número de quirófanos en un 53 por ciento al pasar de 15 a 23, así como se duplicarán el número de paritorios al contar con cuatro frente a los dos actuales y las camas de hospitalización para pacientes agudos pasan de 668 a 800, mientras que el número de consultas y locales técnicos crece en un 34 por ciento.

Del mismo modo, este Plan traerá consigo nuevas especialidades como Medicina Nuclear, un nuevo edificio Materno Infantil, nuevos espacios para consultas de Alta Resolución, un nuevo bloque quirúrgico, un nuevo edificio para Laboratorios, así como la adecuación y optimización de los Hospitales de Día y una nueva Área Docente.

En relación al Hospital Universitario de Guadalajara, Fernández Sanz ha recordado que este proyecto estuvo suspendido entre 2011 y 2015.

Asimismo, el 29 de julio de 2016 se presentó el Plan Funcional para la ampliación del Hospital Universitario de Guadalajara. Ello supone que se va a duplicar la superficie actual, de 53.000 metros cuadrados, hasta alcanzar los 117.000.

Con ello se pasará de las 432 camas actuales a 603 camas en habitaciones que serán mayoritariamente individuales para garantizar la mejor atención e intimidad de los pacientes, si bien podrían duplicarse hasta alcanzar las 771 camas en caso de necesidad.

Además, los boxes de Urgencias pasan de 17 a 25, el número de consultas externas pasa de 185 a 251 con la ampliación y los quirófanos de 11 a 19. Además de duplicar el espacio físico, traerá consigo una mayor cartera de servicios centrada en Medicina Nuclear y Cirugía Pediátrica.

Respecto al Complejo Hospitalario de Cuenca, Fernández Sanz ha informado que las obras de este complejo se suspendieron entre febrero de 2012 hasta noviembre de 2015.

El nuevo centro hospitalario, va a contar con un área ambulatoria compuesta por 120 consultas y gabinetes, 13 quirófanos y un total de 508 camas.

Se trata de un importante proyecto tanto sanitario como económico, que permitirá además un aprovechamiento sostenible del medio ambiente, pues el agua caliente, la calefacción y la refrigeración del nuevo hospital de Cuenca funcionarán mediante la biomasa que se extraerá de los montes de la provincia conquense.

Fernández Sanz ha destacado el nuevo Plan Funcional para el nuevo Hospital Universitario de Cuenca reseñando su modernidad, calificándolo como “revolucionario”.

Asimismo, ha señalado que dispondrá de una Unidad materno-infantil, con una Unidad de Cuidados Intensivos pediátrica en el mismo espacio, una unidad quirúrgica dotada con 13 quirófanos y una sala de Hemodinámica con acceso a las zonas de atención a pacientes críticos.

Además, en el área de Consultas se trabajará en el concepto de módulos asistenciales por especialidades y se dispondrá de quirófanos para que en especialidades como Dermatología, Ginecología y la Unidad del Dolor, puedan realizar allí procedimientos de Cirugía Menor Ambulatoria.

Nuevo Hospital de Toledo

Con respecto al Nuevo Hospital de Toledo, el consejero ha informado de las actuaciones realizadas en 2016 y 2017, recordando que en relación al inicio de ejecución del contrato, en abril de 2016, se comenzaron las obras correspondientes al Proyecto de Actuaciones Previas.

Una vez presentado en febrero de 2016, el proyecto definitivo del Hospital Universitario de Toledo, conviene mencionar la mayor dotación en metros cuadrados más sobre el proyecto diseñado por el anterior Ejecutivo, lo que permitirá que el Hospital Universitario de Toledo sea “ampliable” en el futuro, cuando las necesidades de crecimiento así lo demanden.

Igualmente, se han introducido prestaciones no contempladas en el Plan Funcional adjudicado durante la anterior legislatura, con la incorporación de recursos, además de diferentes cambios en el programa y superficies específicas.

Entre las nuevas necesidades figura la creación de un área de Reproducción Asistida y una zona específica para el trabajo de la coordinación de trasplantes, además de unidades de Ictus, del Dolor y de Patología Mamaria y un Laboratorio Vascular. Igualmente, se incorporan recursos asistenciales que habían quedado fuera del nuevo hospital, como la litotricia y la cirugía programada de Traumatología.

Asimismo, se han incorporado boxes individuales para la dilatación en el área de partos y habitaciones también individuales para toda la hospitalización obstétrica, a la vez que se duplica el espacio destinado a la Unidad de Cuidados Intensivos de adulto, lo que va a permitir llegar a los 62 boxes.

El nuevo proyecto contempla también la incorporación de un área de Radiología de Urgencias, dotada con TC, radiología convencional y ecógrafo; la creación de un área específica de hospitalización penitenciaria, así como el incremento en el número de consultas externas y gabinetes funcionales.

Con todo ello, el nuevo plan funcional modificado establece el incremento en más de un 21 por ciento del número de camas, pasando de las 940 con las que cuenta en actual Complejo Hospitalario de Toledo, a las 1.142 con las que dispondrá una vez finalizado el nuevo centro sanitario y el crecimiento de un 50 por ciento en la dotación de quirófanos, que pasarán de los 26 actuales a 39.

Por último, Fernández Sanz se ha referido al Plan Funcional del nuevo Hospital de Puertollano, presentado en diciembre de 2016 y cuyo primer borrador propone un centro sanitario con una superficie construida de más de 42.000 metros cuadrados, frente a los 13.700 que ocupa el actual Hospital Santa Bárbara.

En este punto, Fernández Sanz ha afirmado que debido a la no aprobación de los presupuestos para el año 2017, la puesta en marcha de este proyecto, así como los avances en el resto de las obras, podrían verse afectados de forma negativa.

“Estamos avanzando, y poco a poco veremos cómo las obras toman una velocidad de crucero que nos permitirá ver como se completan en un futuro cercano unas obras tan importantes para la salud de los castellano manchegos”, concluyó el consejero de Sanidad.

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