Isidro Sánchez Sánchez

isidroSanchezAntonio Hernández Marín, deportado en Mauthausen, revive y se convierte en Twitter de enero a mayo de 2015 en @deportado4443. Le siguen cerca de cincuenta mil personas, gracias a la idea de su sobrino Carlos Hernández de Miguel. Tal iniciativa se completa ahora con las ilustraciones de Ioannes Ensis (Juan Espadas) y aparece el libro Deportado 4443. Sus tuits ilustrados (Ediciones B, 2017), trabajo realizado con rigor histórico.

Y es que en las últimas semanas son noticia los republicanos españoles ingresados en campos de concentración por los gerifaltes de la Alemania nazi, donde muchos murieron. Más de 9.000 son internados entre 1940 y 1945 y la mayor parte de los poco más de dos mil que logran sobrevivir no regresan nunca a España. Durante la España franquista sus vivencias se olvidan y su memoria es menospreciada y ya en democracia su recuerdo no es, desde luego, una prioridad. Como escribe hace unos días en el principal diario catalán María-Paz López, corresponsal en Berlín, “El reconocimiento llegó tardío, y la memoria de sus penalidades todavía flaquea” (La Vanguardia, 8.5.2017).

1. Ha aparecido hace sólo unos días
Ha aparecido hace sólo unos días

Por ejemplo, en Sachsenhausen, a 30 kilómetros de Berlín, el régimen nazi encierra sobre todo a políticos y sindicalistas, entre ellos al socialista Francisco Largo Caballero, con 74 años cuando llega a finales de 1943. Explica el francés Roger Bordage, de 91 años, superviviente de ese campo y todavía presidente del Comité Internacional de Sachsenhausen (ISK), que “la vida era durísima; golpes, lavarse con agua helada, un líquido negro que decían era café, un pedazo de pan y salchicha”. Bordage entró a los 18 años, con 73 kilos, en dicho campo de concentración y salió a los 20 con un peso de 33.

Uno de los muchos españoles internados es Isidro Sánchez Sánchez. Su sobrino nieto Juan Pedro Rodríguez Hernández, profesor de Historia y subdirector en el Centro Madrid Sur de la UNED, es entusiasta defensor de su memoria, realiza laboriosas investigaciones y escribe lo siguiente en relación con su apasionante trabajo: “Este viaje, casi iniciático en lo personal, no ha hecho daño a nadie. Reclamo el derecho de cualquier persona a defender su búsqueda, su pasado, sus familiares, su memoria. Su derecho a tirar del hilo o de la manta si le place. Las posibilidades que dan las nuevas tecnologías son impresionantes, también lo son la colaboración entre las instituciones a nivel internacional; en este camino me he encontrado asociaciones que desarrollan una gran labor, como la Fundación de la Resistencia con su jefe de archivo, Fabrice Bourrée, o el propio archivo de Dachau, que es un museo a día de hoy”.

Isidro Sánchez Sánchez. Fuente: Juan Pedro Rodríguez
Isidro Sánchez Sánchez. Fuente: Juan Pedro Rodríguez

Isidro nace el 14 de diciembre de 1909 en Madroñera, pueblecito cercano a Trujillo, en el seno de una familia de jornaleros. Tras la sublevación militar y la encarnizada ocupación de Extremadura por las tropas sublevadas, como estudia Francisco Espinosa Maestre en La columna de la muerte. El avance del ejército franquista de Sevilla a Badajoz (2003), escapa hacia zona republicana. Juan Pedro Rodríguez lo narra así: “Aquella mañana de 1936 mi tío abuelo, Isidro, salió del pueblo a primera hora de la mañana con su borriquito. Cada varios pasos miraba para atrás, para ver si alguien le seguía, y veía cada vez más lejos las casas de Madroñera (Cáceres). El día anterior habían entrado los nacionales en el pueblo con un balance de varios asesinatos, y con un marcado ambiente de tensión” (nuevatribuna.es, 22.8.2016).

Presos polacos celebran su liberación en Dachau por el ejército estadounidense (1945). Fuente: Historygram
Presos polacos celebran su liberación en Dachau por el ejército estadounidense (1945). Fuente: Historygram

Como miembro del Ejército Popular alcanza el grado de teniente y con la derrota republicana cruza la frontera hacia Francia. Durante la Segunda Guerra Mundial forma parte de la Resistencia y se incorpora a la Brigada del Ariège, en la que es comandante de uno de sus batallones. Es capturado el 3 de octubre de 1943 en Tarascon-sur-Ariège, mientras esconde a varios aviadores aliados derribados por los alemanes (Ver la página Deportados). Tras pasar por diversas prisiones y soportar represiones diferentes es enviado al campo de concentración de Dachau, donde recibe el número de prisionero 73.986 y es “clasificado, junto a sus compañeros, como trabajador esclavo y preso político”.

Campo de concentración de Dachau, Alemania Fuente: Historygram
Campo de concentración de Dachau, Alemania Fuente: Historygram

Tras la llegada de las tropas estadounidenses a Dachau, el 29 de mayo de 1945, Isidro y sus compañeros son liberados y trasladados a Francia. Gracias a las gestiones del gobierno francés su mujer y sus tres hijos llegan de España hacia 1947 y fijan la residencia en Toulouse, donde Isidro fallece en 1977.

Para combatir el negacionismo hay en Dachau desde 1968 una inscripción del Memorial Internacional en varios idiomas que, traducido del francés, indica lo siguiente: “Que el ejemplo de los que fueron exterminados aquí de 1933 a 1945 en la lucha contra el nazismo, haga que los vivos se unan para defender la paz, la libertad y el respeto de la persona humana”.

Isidro Sánchez
Desde el revés de la inopia

Relacionados

13 COMENTARIOS

  1. Dos veces he visitado Mauthausen, la última vez (hace cuatro años) habían transformado el recinto en una especie de parque temático donde sólo faltaba Mickey Mouse. El olor inolvidable a ser humano hacinado de las cámaras de gas había desaparecido, ahora estaban limpias y agradables.

    Igual los barracones.

    No soy republicano, sé bien que un preso del pueblo de mi padre estuvo allí y fue asesino de retaguardia, ya me entienden. No todo el que estaba allí era precisamente un bendito. Muchos nacionales tampoco lo eran. Generalmente el criminal no iba a luchar en primera línea, hacia su sucia guerra en retaguardia frente a civiles. Manuel Chaves Nogales lo describe muy bien en su obra.

    Mi recuerdo para los compatriotas españoles muertos en los campos nazis. El único sitio, Mauthausen, donde una bandera republicana española me emociona.

    Ante todo españoles y hermanos.

  2. Siempre me ha llamado la atención que los ancestros de estos rojos contemporáneos, herederos de la peor tradición de la izquierda española, son unos santos, a lo peor mártires. En las filas del Frente Popular parece que anidó una mutación extraña que expulsó la maldad. Curioso.

    La mención a Largo Caballero me ha conmovido. Un sujeto que tuvo que ser reprendido por Stalin por su extrema crueldad con propios y extraños se convierte gracias a las vicarias manos de don Isidro en un pobre viejito maltratado por los malotes nazis. Vaya.

    Omito valorar a los protagonistas del resto del relato pues desconozco sus azares y venturas. Pero reitero lo dicho: ¿Qué méritos debe cumplir un hombre en una guerra para ser ascendido desde soldado raso a teniente? Y si no hizo nada malo, ¿por qué huye de su país?

    • Solo por pertenecer aun partido o sindicato de izquierda determinado te podían liquidar. Era lógico el miedo. Los de Paco pasaban a cuchillo y luego preguntaban.

      Cierto lo de Largo Caballero, un golpista contrario a la democracia y el pluralismo que tiene calles y demás. Asco.

      Y todavía más real el aura de santidad de todos estos republicanos opositores. Nunca justificada su liquidación sin que eso signifique que fueran luchadores por la democracia, en absoluto. La mayoría eran radicales que defendían un régimen liquidador de los opositores (parte de los socialistas, comunistas, anarquistas). Confundir la lucha antifascista con la lucha por la libertad individual.

      La duda con el tipo este es si era comunista y si paralizó su trabajo en la resistencia por el acuerdo germano-soviético como les ordenó el demócrata Stalin. Curiosidades de estos luchadores por sus ideas

      • Vale, acepto la enmienda. Los de Paco atizaban y luego preguntaban, ¿pero acaso no hacían lo mismo los del otro bando? Era una guerra. Y pertenecer a un sindicato te podría suponer la muerte, cierto. Pero ser integrante de la Falange o un meapilas de la CEDA tenía las mismas consecuencias. No digamos ya reconocerte católico o formar parte del clero.

  3. Creo en mi humilde opinión que el tema de campos de concentración supera con creces la crueldad de la guerra civil. Y la complicidad de Franco en ese tema supera com creces la crueldad del momento concreto de guerra, cruel en dos bandos, pero que em el tema de campos de concentración ya resulta repetitivo. La complicidad de Franco hacia ese tema decanta inequívocamente la balanza de la crueldad, y hace que aunque muchas personas republicanas no fuesen santos del 36 al 39, si justamente lo pasen a ser desde el 39 en su desgracia y en su combate al FASCISMO internacional. Mientras el aval fe Francos y los nacionales es enviar tropas de respaldo a Hitler… Quien les escribe es Juan P. Rodríguez, el sobrino de Isidro el 73986 de Dacahu. Mi tio abuelo cogió las armas para luchar contra Hitler, siendo reconocido por los EEUU, Francia, Gran Bretaña e incluso ALEMANIA.

    • La muerte en campos de concentración es injustificable. Fue un exterminio sistemático horrible.

      Mi reconocimiento a tu familiar. Franco abandonó su neutralidad por su no beligerancia y ciertamente abandonó a su suerte a esos españoles, que deberían haber sido repatriados.

      Hubo actos de valentía y patriotismo cuando divisionarios y milicianos españoles se encontraron en el frente ruso, y mutuamente se ayudaron cuando cayeron prisioneros en el frente de guerra.

    • Nadie compara la crueldad en la Guerra Civil con los campos de concentración alemanes; al menos yo no lo he entendido​ así. Desconozco a qué se refiere usted cuando habla de «la complicidad de Franco hacia ése tema», entiendo que se refiere a los campos de concentración.

      Permítame decirle que la Guerra Civil no era una lucha por la democracia. Ninguno de los dos bandos luchaba por la democracia porque ninguno creía en la democracia. Los unos porque querían implantar la dictadura del proletariado; los otros porque sabían tras la experiencia de la República que la democracia sería utilizada por los primeros para eliminarlos e imponer una dictadura al más puro estilo soviético, era pues para ellos una lucha por la supervivencia, entre otras cosas.

      Cuando se habla del apoyo militar de Franco a Hitler, en concreto de la División Azul, se omite que esa división era la respuesta de Franco a Stalin por su visita en la Guerra Civil. Tampoco se cuenta la muy meritoria labor de aquellos militares, pero eso es otro tema.

      Mucho se habla de la afinidad Franco-Hitler, pero poco se cuenta la ominosa actuación de las democracias europeas pactando en Munich la entrega de parte de Checoslovaquia, o el pacto de amistad con el​ piadoso Stalin para repartirse Polonia. Hitler, hombre del año de la revista TIME. En fin, no quiero extenderme demasiado.

      «El Generalísimo Francisco Franco, Jefe del Estado Español, falleció el 20 de noviembre de 1975. Al margen de cómo juzgarle la Historia, lo que sí es seguro es que en la historia judía ocupará un puesto especial. En contraste con Inglaterra, que cerró las fronteras de Palestina a los judíos que huían del nazismo y la destrucción, y en contraste con la democrática Suiza que devolvió al terror nazi a los judíos que llegaron llamando a sus puertas buscando ayuda, España abrió su frontera con la Francia ocupada, admitiendo a todos los refugiados, sin distinción de religión o raza. El profesor Haim Avni, de la Universidad Hebrea, que ha dedicado años a estudiar el tema, ha llegado a la conclusión de que se lograron salvar un total de por lo menos 40.000 judíos, vidas que se salvaron de ir a las cámaras de gas alemanas, bien directamente a través de las intervenciones españolas de sus representantes diplomáticos, o gracias a haber abierto España sus fronteras».

      «The American Sephardi”, con motivo del fallecimiento de Franco.

        • Sencillamente, a Franco le convenía hacerse amigos entre los judíos cuando Alemania estaba ya perdiendo la guerra. Por demás, no debía quererlos demasiado cuando pensaba que conspiraban contra él aliados a los masones; jugaba a dos barajas, simplemente. Para él un judío era tan matable como un republicano. Mejor nos hubiera ido si tuviéramos a Mussolini; ese no era tan matarife, ni tan mediocre, ni tan beato. Para más detalles del mito «Franco, salvador de los judíos», véase

          https://es.wikipedia.org/wiki/Jud%C3%ADos_durante_el_franquismo

          No sé cómo se atreven a divulgar tantos bulos los negacionistas del genocidio franquista.

  4. Los españoles huyeron de la guerra y acabaron en otra pesadilla.
    La pancarta, escrita en español, que se colocó el 6 de mayo de 1945 en Mauthausen para saludar a la 11ª División Acorazada de EE.UU. lo explica todo: «Los españoles antifascistas saludan a las fuerzas liberadoras».
    Por cierto, una de las empresas establecidas en Mauthausen para aprovecharse de la esclavitud fue BAYER AG, principal productor alemán de medicamentos…

  5. Gracias a Juan Pedro RODRIGUEZ, mi primo, Gracias al senor Isidro SANCHEZ SANCHEZ que publica esto.
    Mi padre ha tenido reconocimientos de la Francia, de la Inglaterra, y tambien de Alemania.
    En muchisimos sitios de Francia han colocado pancartas con nombres de los espanoles que lucharon para la Libertad !
    El de mi padre esta tambien en muchos sitios de Francia…
    Senor el Censor ! Mi padre no era malo era solo Republicano,
    y por sus escritos veo que usted no lo es… lastima ! El lucho por un Ideal veo que usted no tiene ! yo soy republicana pues naci en Francia despues de la guerra y viva la Republica y viva la Libertad !!!!!! Liberté Egalité Fraternité!!!!! Petra Sanchez

ESCRIBE UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img