Suele ser habitual que de vez de cuando el ínclito Miguel Angel Martínez, antediluviano diputado, primero nacional y luego europeo, español y paisano, convoque a los periodistas de la región. En la última de hace unos días reconoció que en Castilla-La Mancha los ciudadanos vienen a responder más o menos ¿cuálo?, cuando se les pregunta por la Unión Europea y sus instituciones, entre ellas el Parlamento Europeo. Y nos surge una reflrexión. ¿Hasta qué punto nuestros europarlamentarios son responsables, por falta de pedagogía política, de ese desconocimiento? Lo cual nos pone en el brete de decir en voz alta si Europa no se concibe por la sociedad -otra cosa es el debate de qué Europa queremos- como el retiro dorado de nuestros políticos.