El portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, anunció hoy que el Gobierno regional ha decidido suprimir en un 60% los altos cargos existentes dentro de la estructura del Ejecutivo. Así, dio a conocer los acuerdos tomados en el Consejo de Gobierno, que se ha celebrado esta mañana, entre los que se encuentra esta medida, que supondrá, según Esteban, un ahorro de 12,6 millones de euros a las arcas públicas.
La nueva estructura de Gobierno, -que será publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha- es la primera medida que se ha tomado, según explicó Esteban, “en función a la austeridad y eliminación de gastos superfluos, comenzando por el propio Gobierno, que quiere, de manera ejemplar, ser el primero en apretarse el cinturón”. Además, el también consejero de Empleo, informó de que el número de direcciones generales existentes se verán reducidas en un total de veintidós y esto se sumará, además, a la supresión de las delegaciones provinciales de las consejerías, que pasarán de treinta a cinco.
Esteban calificó esta medida de “austera, en congruencia con lo anunciado por la presidenta María Dolores Cospedal, tanto en la campaña, como en las posteriores comparecencias y, sobre todo, en el debate de investidura”.
Supresión de organismos
Además, el portavoz regional anunció que en el próximo periodo de sesiones de las Cortes regionales, el Gobierno tiene previsto, dentro del marco de medidas de austeridad, llevar al Parlamento distintos Proyectos de Ley, entre los que desglosó “el que dé carpetazo a las delegaciones provinciales de las distintas consejerías de la Junta”, así como “las leyes que supriman el Defensor del Pueblo, el CES y la Comisión Regional de la Competencia”.
Por otra parte, Esteban explicó que se llevará a las Cortes “la sustitución de los treinta delegados de la Junta en las cinco provincias de Castilla-La Mancha, que ahora pasan a ser cinco” y anunció que se ha acordado el nombramiento de dichos delegados, que son Porfirio Herrero en Guadalajara; Fernando Jou en Toledo; Javier Cuenca en Albacete; Antonio Lucas-Torres en Ciudad Real y Rogelio Pardo en Cuenca.
En otro orden de cosas, el portavoz del Ejecutivo autonómico tildó de “malo y delicado” el estado de las cuentas de Castilla-La Mancha, y anunció que la próxima semana conoceremos “la situación real de las finanzas en la región”. Leandro Esteban mandó un mensaje de tranquilidad dentro de la mala situación económica que tendrá que afrontar el Gobierno regional, diciendo que “los servicios sociales y el pago de las nóminas a los funcionarios de la Junta son prioridades dentro del Gobierno, que estarán garantizadas y cubiertas”, por lo que apeló “a la tranquilidad y la confianza de los ciudadanos y los trabajadores de la Junta”.
