Ricardo Fernández del Moral se hace con la preciada Lámpara Minera del Festival Internacional del Cante de las Minas. Se trata de la primera vez en la historia del festival que el ganador no ha necesitado acompañarse de un guitarrista para interpretar los diferentes cantes. También era la primera vez que Fernández del Moral participaba en este concurso, el más prestigioso dentro del mundo del flamenco en España, y por ende, del mundo.
El cantaor y guitarrista daimieleño Ricardo Fernández del Moral «arrasaba» utilizando las palabras de la propia organización, en el 52 Festival Internacional del Cante de las Minas, al alzarse durante la madrugada del sábado con la preciada Lámpara Minera, dotada con 15.000 euros, añadiendo además a su triunfo los premios por soleares, por tonás, por malagueñas y por tarantas.
Tras una «intensa y vibrante» final en la que competían 11 artistas repartidos en seis cantaores, dos bailaores, un guitarrista y dos instrumentistas, Fernández del Moral, de 36 años, se ha erigido en el verdadero triunfador de la final, a la que ha llegado acompañándose de su propias manos a la guitarra y, según la nota de prensa de la organización, «haciendo gala de una voz rotunda».
Se trata de la primera vez en la historia del Festival Internacional del Cante de las Minas que el ganador de la Lámpara Minera no ha necesitado acompañarse de un guitarrista para interpretar los diferentes cantes, también era la primera vez que Fernández del Moral participaba en este festival, el más prestigioso dentro del mundo del flamenco en España. Él mismo admitía en los micrófonos de Radio Daimiel que llegar a semifinales, para él, ya era suficiente premio, lo que ocurrió después, «aún no se lo termina de creer».
Fernández del Moral iniciaba sus pasos en el flamenco como guitarrista, primero de la mano de su familia, en especial su padre, Ricardo, y después de forma más especializada recibiendo clases de maestros como Óscar Herrero y Manolo Martín. Recordaba su infancia escuchando a los grandes. Lo de animarse a cantar y tocar a la vez es algo que comenzó el año pasado, buscando, según sus palabras, «algo distinto a lo habitual». Una apuesta que supone un reto complejo por un lado, pero por otro también otorga la ventaja de que, según explica, «como cantaor, mi guitarra es la que mejor me acompaña».
Con la humildad de los grandes, Fernández del Moral promete «seguir trabajando, luchando y aprendiendo» para defender este título que califica como «una gran responsabilidad».
La música vuelve a poner a Daimiel en el mapa
Con esta gesta, la cultura, y más concretamente la música, vuelve a poner a Daimiel en el mapa. Casi hace un año del histórico triunfo de Manuel Blanco en el Concurso Internacional de la ARD de Alemania, en la categoría de trompeta. Aquel, es el concurso más importante a nivel mundial para jóvenes intérpretes. Ahora, ha sido «el niño de Ricardo» el que logra alzarse con el primer premio del Festival más importante a nivel mundial de arte flamenco. Todo un hito para ambos intérpretes daimieleños, cada uno en su estilo.
