Tres ponencias se presentarán en la segunda edición de las jornadas de historia de Argamasilla de Calatrava, que se celebran el próximo día 18 de octubre, organizadas por Ediciones C&G y coordinadas por José González Ortiz. Una de las novedades con respecto a la edición anterior es que los asistentes a estas jornadas tendrán la ocasión de adquirir el ejemplar de las ponencias presentadas con documentación mucho más ampliada de cada una de las comunicaciones.
Tomás Ballesteros Escudero (1960), originario de Torre de Juan Abad, Señorío de Quevedo en el Campo de Montiel. Diplomado en Magisterio por la especialidad de Ciencias Sociales es Maestro de Enseñanza Primaria en la escuela pública por oficio y vocación. Desarrolla su labor docente en el colegio público “Juan Ramón Jiménez” de Puertollano.
Desde 2010 forma parte del proyecto “Todos los nombres de la represión de posguerra en la provincia de Ciudad Real” en el que un grupo de antropólogos e historiadores trabajan en el análisis cualitativo y cuantitativo de la represión franquista.
La ponencia que Tomás Ballesteros expondrá en la ‘VIII Jornadas de Historia Local ‘Biblioteca Oretana’ II de Argamasilla de Calatrava’ tendrá como título el de “Todos los nombres de la represión de posguerra en Argamasilla de Calatrava”, dentro del marco del proyecto de investigación citado anteriormente.
Para Ballesteros “la represión de posguerra en Ciudad Real es un período histórico insuficientemente estudiado y nuestro propósito se resume en contribuir al reconocimiento público de todas aquellas personas que sufrieron la represión franquista con resultado de muerte, en este caso en Argamasilla”, comenta el autor de la ponencia.
En el desarrollo de la exposición se concretarán los nombres y las circunstancias que rodearon la muerte de las personas víctimas de la represión y que se ha tenido en cuenta para registrar a los fallecidos durante este período histórico. Se han establecido los siguientes:
Los muertos en los primeros días de “la victoria”, en torno al primero de abril de 1939, como por ejemplo el 19 de julio de 1939 son fusilados en las tapias del cementerio de Argamasilla 14 vecinos de diferentes tendencias izquierdistas: Izquierda Republicana, PSOE y UGT. Los maniataron, maltrataron y ejecutaron enterrándolos en una fosa común que se ocuparon de hacer «invisible» salvo para sus familiares. Entre ellos estaban los hermanos Cañadas Escobar, Leonardo y Felipe de 48 y 52 años. Alpargatero y Avicultor, Presidente y Vicepresidente de Izquierda Republicana. Un maestro del pueblo, Valentín Ferrero, de 29 años, fusilado el 19 de julio de 1939, acusado en la causa general de pertenecer al Comité de Defensa de la República que organizó «saqueos».
Los fallecidos como consecuencia del cumplimiento de penas de muerte dictadas en juicios sumarísimos entre 1939 y 1945, un ejemplo de ello, el 29 de octubre muere en el cementerio de Argamasilla Emilio Siller, jornalero ugetista de 30 años a causa de «heridas penetrantes en cráneo y torax» es decir, lo fusilaron. El 18 de noviembre de 1939 en Almodóvar del Campo ejecutan a cinco vecinos de Argamasilla, entre ellos a los hermanos Fernández Valero, Alejandro y Prudencio, de 39 y 34 años, conocidos por el apodo de los «Pelogato». Los dos jornaleros y afiliados al PSOE y la UGT.
Y por último los fallecidos en centros penitenciarios; muertos por violencia en el exilio y los fallecidos “de la sierra”. Así murieron en la prisión del Almodóvar Leonardo Morales Gómez «Pascualín», jornalero, muerto a los 34 años; Jesús Rodríguez Gómez, jornalero de 30 años y Epifanio Muñoz Molina, minero que fue concejal y presidente de Abastos, ugetista que se pasó a la CNT al comenzar la guerra y de la que fue su secretario local.
1941 comienza con un hecho más dramático, si cabe la expresión en estas circunstancias. Los días 2 y 3 de enero mueren los niños Ferrer Ruiz Gijón «Ángel» de 5 años y Galán Ruiz Gijón «Santiago» de 7 años. Según el acta de defunción Ferrer muere el día 2 de enero de 1941 de gastroenteritis aguda y Galán muere el día 3 de enero de 1941 de convulsiones. A los niños Ferrer y Galán los rebautizan una vez acabada la guerra con los nombres «más cristianos» de Ángel y Santiago. Eran hijos de Santiago y Francisca. Santiago, el padre, había sido fusilado dos meses antes en la cárcel de Almodóvar por ser de izquierdas.
En Argamasilla de Calatrava se han recogido los datos de cincuenta y siete muertos en estos años, una población de unos cuatro mil habitantes por aquél entonces.
Tomas Ballesteros puntualiza que “retomamos la memoria de toda una comunidad de hombres y mujeres que se sintieron libres. Recuperar su dignidad nos ayuda a comprender y aceptar mejor nuestro pasado».
