La asociación musical Banda de Música de Puertollano, compuesta por la mayoría de los miembros de la antigua banda municipal, se presentará oficialmente el próximo 24 de noviembre, a las 12,30 horas, en el teatro del Colegio San Juan Bosco. El concierto, gratuito, estará dirigido por quien fuera director de la banda municipal, Ángel Parla. En esta primera entrega de las dos que desgranarán el programa del concierto, los músicos ofrecen a los lectores de Miciudadreal.es un análisis divulgativo de algunas de las piezas que ejecutarán.
TANNHÄUSER
Comentario de José Ignacio González Mozos. Trombón solista.- Con las óperas “El holandés errante”, “Lohengrin” y “Tannhäuser” compuestas en la convulsa década de los cuarenta del siglo XIX, Richard Wagner comienza a recurrir a la historia medieval, la leyenda y el mito germánico en el desarrollo de sus libretos, temática que utilizará como materia prima de su nuevo estilo. Este nuevo estilo pasa por desarrollar un lenguaje musical armónico más denso, una orquestación más amplia y con mayor protagonismo en la acción dramática, y una división más difusa entre Arias, conjuntos y coros que hará aparecer los “Leitmotiven”; motivos musicales recurrentes de gran importancia en la obra de Wagner con los que tratará de describir situaciones, lugares y personajes.
La ópera en tres actos “Tanhäuser”, estrenada en el Teatro de la Corte Real de Sajonia en Dresde el 19 de Octubre de 1845, está dotada de un exacerbado dramatismo que mezcla el amor profano del Venusberg con el amor puro de Elisabeth y la redención del personaje principal a través del amor hacia esta joven. Fue revisada por el autor en 1847 y 1861 con motivo de las representaciones que tuvieron lugar en la Ópera de París, para lo cual incluyó algo tan del gusto francés como es un número de ballet que añadió tras la obertura.
La obertura de la ópera “Tannhäuser”, que les ofrecemos en el concierto de la banda de música de Puertollano, comienza con la exposición del tema principal del coro de peregrinos en el estilo solemne de un coral que será expuesto por la banda en un expresivo pianísimo, desarrollado de manera majestuosa por maderas y trompas el cual nos conducirá a un segundo tema de carácter cromático que intenta expresar la emoción erótica de Venusberg y que desembocará en una nueva y brillante exposición del motivo principal del coro de peregrinos, que ahora es retomado en fortísimo por trombones y trompetas finalizando en una densa Coda final de acordes que reafirmarán la tonalidad.
RIENZI
Comentario de José Ignacio González Mozos. Trombón solista.- El gran genio musical de Wagner dio trece óperas al mundo del arte, de las que solo diez forman el llamado “canon de Bayreuth”. Las tres primeras óperas; “Las hadas”, “La prohibición de amar” y “Rienzi”, fueron consideradas por el propio autor como “intentos” de juventud, llegando a renegar de ellas cuando se encontraba en la cumbre de la fama. Esto explica que “Rienzi” nunca se haya estrenado en el festival de Bayreuth, escaseando las grabaciones discográficas y las representaciones; una verdadera lástima teniendo en cuenta la gran acogida que obtuvo esta “Grand ópera” de seis horas de duración el día de su estreno en Dresde el 20 de Octubre de 1842.
La instrumentalización que el régimen nazi hizo de la obra de Wagner, tiene una especial relevancia en esta obra en la que los delirios de Hitler encontraron en el personaje principal- Cola de Rienzi- una especie de antecedente visionario personal. Cola de Rienzi, líder populista de la Italia medieval, derrotó a las clases nobles para darle el poder al pueblo, hecho que fue visto por Hitler como parte de su destino político y de su vocación “condotiera”. Probablemente Hitler prestara menos atención al condicionante de que Cola de Rienzi, magnánimo tribuno al principio, degenerase en una especie de tirano que es ajusticiado por el mismo pueblo al que intentó liberar de la opresión nobiliaria años atrás. Al igual que Cola de Rienzi en su horrible final, Hitler ardería en el Búnker berlinés años más tarde junto al manuscrito original de la obra, regalo personal de la familia Wagner al Führer.
En el concierto vamos a interpretar la obertura de esta ópera, que comienza con una nota larga de trompeta que simula una llamada de guerra, finalizando esta brillante obertura con una marcha militar.
SUSPIROS DE ESPAÑA
Javier Fernández.- Este popular pasodoble fue compuesto por el maestro Antonio Álvarez Alonso en Cartagena, en 1902. En 1938 se le añadiría letra por Juan Antonio Álvarez Cantos, sobrino del compositor, para ser interpretado en una película por Estrellita Castro. Posteriormente fue versionada la letra por otras grandes figuras, como Concha Piquer.
El maestro Álvarez Alonso ofrecía conciertos animando las veladas del café La Palma Valenciana, en la calle Mayor de Cartagena. Una noche, al terminar su actuación, enseñó a sus amigos una melodía en forma de pasodoble que había escrito sobre una mesita del café, y que pronto fue acogida con alborozo por su clara inspiración.
En su recorrido nocturno, se detuvo ante la confitería España, ubicada frente al café de sus actuaciones, y observando una confitura típica llamada «suspiros» (avellanas caramelizadas), se inspiró para bautizar «Suspiros de España» a su nueva partitura.
El pasodoble fue estrenado por la Banda de Música del 3er Regimiento de Infantería de Marina el día del Corpus Christi de 1902 en la plaza de San Sebastián de Cartagena. Una placa conmemora la efemérides en el lugar del estreno.
En los exilios provocados en la II república, en la Guerra Civil yen la posquerra, el pasodoble «Suspiros de España» simbolizó la nostalgia del país perdido. Su composición en el modo musical menor evoca tristeza, con leves modulaciones a su relativo mayor, buscando el contraste que toda obra maestra necesita.
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