Dice una autoridad cultural local, de forma impasible, apostólica y algo rotunda, que “el Belén es un arte efímero”; sin observar que lo suyo, su afirmación, es pura tautología y puro oxímoron. Ya que todo Belen, Nacimiento o Pesebre, toda recreación belenística argumentada como un diorama, no deja de ser pura constatación del paso implacable del tiempo. Como dice y cuenta un viejo villancico que rememora, justamente la temporalidad de toda celebración, y particularmente de esta Natividad que viene y luego se va para siempre. Como uno mismo acabará marchándose.
Por no señalar la otra contradicción neomoderna a manera de conjetura, de querer emparentar el Arte con lo efímero; cosa que empieza a ser preocupante, dada la creciente extensión de lo tornadizo, caedizo, voluble, cambiante y aún efímero. Cuando, justamente sabemos, que de las pocas cosas que aspiran a durar, tal vez las más señaladas sean las llamadas artísticas. Por ello, esa musica del “Arte efímero”, aplicada al belenismo o a cualquier otro asunto, suena tan mal como la música militar, que no deja de ser, por otra parte, otro oxímoron muy notable.
Desde la Catacumba de Priscila, en la que aparece por primera vez la Virgen con el Niño en brazos; hasta la historia de San Francisco tras su peregrinación a los Santos Lugares, para celebrar la Eucaristía, en la nochebuena de 1223, en una cueva del pueblo italiano de Greccio, preparando una representación viviente de un pesebre con mula y buey, como un anticipo del belenismo, todo es tiempo pasado y polvoriento.
En ese pretensión del “Arte efímero” español contamos con los desvelos de la orden franciscana primero, en el siglo XIV, y con la introducción teatralizada de Carlos III del moderno belenismo en el siglo XVII. Pero ello no da lugar a afirmaciones como la que da lugar a estas líneas de despedida de un año, este sí, que efímero y caedizo. Pero nada artístico. Por más que así lo propalen y lo pretendan.
Periferia sentimental
José Rivero
Muy hermoso artículo.
Pues no veo yo el oxímoron por ningún lado. ¿Dónde está la contradición entre Belén y efímero? ¿No es lo mismo? ¿No dura el Belén sólo unos días, salvo los belenes que pueda haber en un museo, considerados como obra artística?
Esto último es algo distinto, como puede también podría suponer la interpretación de una obra musical. Es aire puro en movimiento. Pero bueno, la partitura está ahí. No es efímera.
Yo creo que la autoridad cultural local, que no sé quién será, se estaría refiriendo a los belenes que se montan y se retiran en el plazo de unos días.
Tampoco entiendo a qué se refiere usted con la tautología. ¿A las palabras de la autoridad local? ¿Va por ahí repitiendo que los belenes son arte efímero? ¿O es que todo belén es una repetición de sí mismo? Y beben y beben y vuelven a beber ¿es una tautología, o yo no entiendo nada?
La tautología no es el Belen efímero, sino el Arte efímero, amigo Petrus. Por lo demás la autoridad local citada, es el señor Concejal de cultura. Que para colmo viene de los terrenos artísticos, que ahora enlaza con los belenisticos.
efímero repetitivo existe? Buen año, Rivero
No creo, pero lo podemos registrar cómo expresión de combate. Lo que se repite es que no dura; y lo que dura es eterno. Como la felicidad que nos deseamos todos los huérfanos de convicciones para el 2014. Salud a ti, a la cofradía, a los lectores, patrocinadores, apuntadores y hasta Salud a los opositores.
Más de cuatro centurias contemplan el cuadro que ilustra el texto de José Rivero, sin embargo, qué efímero es el arte! Bueno, mil perdones a todos aquéllos que se sienten insultados por la ironía , la sátira y las mil y una figuras retóricas,»mi mamá me mima» será , a partir de 2014, la frase más recurrente en los artículos de mis admirados colaboradores de MCR, y los curas explicarán las parábolas muy clarito, que se enfada el gentío.
Abrazos, salud para todos.
Acabo de conocer, vía Mainer, una novela de Agustin de Foxa, ‘Viaje a los Efímeros’, de 1965. Se relata una batalla entre los Eternos y los Efímeros.