El panorama político empieza a cambiar

Asamblea local de IU Valdepeñas.- A la hora de abordar el análisis de unos resultados electorales, los partidos tienden a realizar juegos malabares comparativos con años, porcentajes, votos, nivel de abstención, carácter de los comicios, de modo y manera que la conclusión final sea lo más beneficiosa posible para los intereses que se defienden.
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Por eso llama la atención que, en relación a las recientes elecciones europeas, los análisis partidarios hayan sido bastante ajustados, quizás por la implacable evidencia de los números. Con la excepción del PP que, en el más puro estilo de “Don Tancredo” Rajoy, mira para otro lado y hace como no enterarse de lo sucedido.

Vaya por delante que el ámbito electoral (europeo, español, autonómico, municipal) condiciona la actitud ciudadana y su voto y las extrapolaciones son por ello problemáticas.Por eso realizaremos la comparación con las anteriores elecciones europeas de 2009

Decíamos en nuestras últimas consideraciones preelectorales que una baja participación electoral abundaría en la débil calidad democrática de nuestro sistema político, ya tocado de ala por una serie de circunstancias que “animan” al progresivo desapego ciudadano hacia la política (incumplimiento de los programas, corrupción, obediencia ciega a poderes no democráticos, etc). Los negros augurios se han cumplido y la abstención ha alcanzado la cifra del 54 % (el 61 en Valdepeñas), análoga a las europeas de 2009. Bien es cierto que el parlamento europeo sigue percibiéndose algo lejano y la participación se incrementa en las elecciones de otro ámbito.

Históricamente, las elecciones europeas, previas a las municipales, autonómicas y generales, siempre han tenido también una lectura interna, suponiendo un primer juicio, un test de las actitudes de los partidos y especialmente del gobernante. Es decir, un excelente momento para rechazar políticas y apoyar alternativas. Y marcan tendencia. Así pues, la primera conclusión que destacamos es el rechazo a las políticas neoliberales que han llevado al empobrecimiento de las clases populares y medias y a la pérdida de derechos civiles. Y en este paquete metemos al PP y al PSOE. El bipartidismo ha sufrido un duro golpe, perdiendo más de medio millón de votos y pasando del 81% a menos del 50%.

El reflejo en Valdepeñas ha sido aún más importante pues si PPSOE sumaban nada menos que el 90,8% en 2009 (8.548 votos) han retrocedido en 2014 hasta los 5.039 votos (pérdida entre ambos de 3.509 votos), bajando hasta el 58% (casi 33 puntos) en el porcentaje.

La aportación de cada uno de estos partidos al desplome bipartidista es parejo. Cada uno ha perdido cerca de 2.600.000 votos y alrededor de 16 puntos en el porcentaje total de votos emitidos. Si el PP aplicara esa teoría de las mayorías silenciosas que le es tan querida en la medición de las movilizaciones ciudadanas, para despreciarlas, qué podrá decir ahora cuando han pasado de la mayoría absoluta a un escueto 26% que supone el 11% del censo electoral: el 89% de la población no quiere saber de ellos.
De todas formas, no echemos las campanas al vuelo, porque el bipartidismo seguirá gozando de mediana salud. El poder de las instancias financieras, internacionales, mediáticas y políticas que lo sostienen son muy poderosas y las hemos visto, y más que las veremos, en acción, utilizando, por supuesto, procedimientos de “guerra sucia”. Señoras, señores, el capitalismo es así.

El PSOE continúa su caída libre, como no podía menos de esperarse tras su falta de credibilidad por la absoluta carencia de autocrítica y, por el contrario, defensa a ultranza de las políticas que aplicaron en el gobierno, inicio de las que ha continuado con dosis más agudas el PP. Permítasenos el consejo fraterno de que giren clara y sinceramente a la izquierda, porque allí nos encontraremos. No basta tampoco con distraer al personal con que si primarias abiertas o no, antes o después del congreso extraordinario, etc.

En Valdepeñas, el PP ha vuelto a ganar en unas Europeas, consiguiendo 2.875 votos (33,1%), que supone una pérdida de 1.719 votos respecto a 2009, pasando de 4.594 a 2.875 y perdiendo 15,7 puntos (del 48,8 al 33,1%). No se explica, por tanto, la alegría postelectoral demostrada. La caída mayor ha sido la del PSOE, que ha quedado en segundo lugar, perdiendo 1.790 votos y pasando de 3.954 (el 42%) a 2.164 (24,9%), lo que supone un retroceso de 17,1 puntos en términos porcentuales de votos.

Izquierda Unida ha casi triplicado sus apoyos con cerca de un millón más de votos (de 588.248 a 1.562.567), incrementando el porcentaje en 6,28 puntos (de 3,71 a 9,99%). En Valdepeñas la subida ha sido también notable, consiguiendo 796 votos (el 9,2%), lo que supone un incremento de sus resultados en 6,7 puntos más que en 2009 (237votos, el 2,5%).Sin caer en la autocomplacencia manifestamos estar satisfechos y agradecidos a quienes nos siguen dando su confianza.

Nuestra felicitación y bienvenida a Podemos, aunque es de suponer que su aparición haya podido perjudicar a Izquierda Unida, cuyos resultados podrían haber sido aún mejores. Han conseguido 1.246.000 votos, el 8%. El haber participado codo con codo en los últimos años en las luchas sociales con quienes han nutrido sus filas, tener programas electorales muy similares, y haber constatado la coincidencia de análisis políticos en las reuniones preelectorales habidas entre ambas organizaciones, son condiciones objetivas que permiten pensar que no es ilusoria una convergencia que devolviera la esperanza a un sector importante de la ciudadanía.

La izquierda en su conjunto ha conseguido un gran avance. La suma de los votos de nuestra Izquierda Plural, más la espectacular aparición de Podemos y Equo supone más de 3 millones de votos, cerca del 20%. Un PSOE renovado y de izquierdas, comprometido, por ejemplo, con la derogación de ese artículo 135 de la Constitución que modificaron alevosamente con el PP, sería bienvenido a ese club.

En Valdepeñas, Podemos ha aparecido con 565 votos, el 6,50%. Careciendo actualmente de presencia en esta ciudad, es prematuro adelantar si se hará presente en las municipales de 2015. Mientras tanto, y al igual que al resto de los votantes de Izquierda Unida, les invitamos a que adopten un compromiso superior y confluyan con nosotros para trabajar conjuntamente en el día a día en nuestra ciudad.

UPyD, con un millón de votos (el 6,5%) ocupa el quinto puesto a nivel nacional, y ha crecido desde el 2,85 % en 2009, habiendo más que duplicado sus resultados. En Valdepeñas se mantienen en tercer lugar con 906 votos (el 10,4%) habiendo crecido desde los 251 votos (el 2,7%) de las anteriores europeas. Un importante ascenso que previsiblemente se ha producido a costa de PP y PSOE.

El otro partido de la derecha, Ciudadanos, que comparte espacio ideológico con UPyD, se ha presentado por primera vez a nivel nacional consiguiendo medio millón de votos, el 3%. En Valdepeñas, con 467 votos (el 5,37%) es el partido de cola.

Concluimos estas reflexiones afirmando que en este nuevo y apasionante ciclo político que se está abriendo, Izquierda Unida mantendrá su compromiso movilizador con los más necesitados, pobres, parados, desahuciados, con los trabajadores en general, con todas las mareas y luchas sociales, que han de continuar. No nos vale con este triunfo parcial. Las decisiones que afectan a nuestra calidad de vida y a nuestro futuro las siguen tomando aquellos que no nos representan.

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