Los países más desarrollados son los que deben implicarse de forma real y activa con los menos tienen y es lo que se ha transmitido el Consejo Local de Cooperación de Puertollano en la voz de Manoli Sánchez, presidenta de la Asociación de Amas de Casa, que leyó el manifiesto en el día contra la erradicación de la pobreza. Al acto acudió la alcaldesa, Mayte Fernández, ediles de la Corporación Municipal y representantes de organizaciones no gubernamentales.
El evento ha sido el colofón a las jornadas de solidaridad «que tratan de sensibilizar a los ciudadanos de una mayor implicación para mejorar la calidad de vida de los demás», como indicó la concejal de servicios sociales, Ana María Moralo.
Previamente, alumnos del ciclo educativo de animación socio cultural del Instituto Dámaso Alonso han caminado por el centro de la ciudad alentando a que los países más ricos muestren su solidaridad efectiva con las zonas del planeta que no salen de la pobreza. Ya en la plaza de la Constitución formaron grupos junto a los asistentes con los distintos países que representaban desde Etiopía a Estados Unidos, Rusia o Italia, que con la simbólica aportación de alimentos ayudaron a hacer un imaginario guiso con el que ayudar a comer a los más desfavorecidos del mundo.
Los recortes agravan la situación
El Consejo Local de Cooperación al Desarrollo de Puertollano se ha unido al Manifiesto de la Alianza Española Contra la Pobreza que deja patente que «los intentos de salida de la crisis de carácter antisocial, basados en recortes de gasto social, agravan la situación de las poblaciones más vulnerables».
No faltan las buenas intenciones, pero se exigen cambios reales dentro una crisis sistemática que aumentan las desigualdades, pobreza y autoritarismo. “Es urgente cambiar este sistema que genera riqueza para el 1% y un empobrecimiento generalizado para el resto de la población, tanto en nuestro país como en el resto del globo. Un sistema que fomenta la guerra para el control geoestratégico de los recursos, la destrucción de la naturaleza y las desigualdades sociales», reza el manifiesto.
Por ello se necesitan cambios radicales en la obtención de los recursos públicos y la manera de invertirlos a través de los servicios públicos y el sistema de protección social. “No pararemos hasta conseguir el mundo que queremos. Queremos un compromiso real a través de la participación y movilización colectiva”, subraya el manifiesto.
