El Centro Agrario El Chaparrillo, dependiente de la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha, va a distribuir 35.000 cangrejos autóctonos en esta temporada en diversos cursos fluviales de la Serranía de Cuenca y de la Sierra de Alcaraz (Albacete) dentro de la campaña enfocada a la reintroducción de ejemplares y mantenimiento de poblaciones en las cabeceras de los ríos de nuestra comunidad donde aún pueden encontrarse.
Desde que se comenzara con la producción intensiva de cangrejo de río europeo o de patas blancas (Austropotamobius pallipes) en el Centro Agrario El Chaparrillo, hace ya más de 30 años, de sus instalaciones han salido más de 1,8 millones de cangrejos para repoblar con esta especie autóctona diversos cursos fluviales de nuestra región y de comunidades limítrofes como Andalucía y Comunidad Valenciana.
El periodo de producción de ejemplares en El Chaparrillo, el centro más representativo en cuanto a producción de entre los pocos que existen de este tipo a nivel internacional, abarca desde mediados de septiembre a finales de octubre, época en que la hembra comienza la fase de puesta y monta. El resto del año se mantienen en piscinas de cría, recría, selección y engorde, clasificados por edades y sexo. Los ejemplares distribuidos para las sueltas son crías y recrías de entre 3,5 y 10 cm.
Repoblaciones donde no haya cangrejos alóctonos
Las repoblaciones, bien sea como reintroducción en un espacio del que habían desaparecido, o bien sea con la intención de reforzar numérica y genéticamente poblaciones silvestres, las realiza personal técnico de la Junta de Castilla-La Mancha, con individuos en buenas condiciones sanitarias y comprobando previamente que no están presentes otros cangrejos, como el americano o el rojo señal, principalmente.
Estos cangrejos denominados alóctonos, aparte de ser sus competidores directos, son vectores habituales de la enfermedad conocida como afanomicosis, causada por un hongo parásito que produce mortandades del cien por cien entre las poblaciones del cangrejo autóctono pero que no afecta significativamente a los primeros.
El Centro Astacícola de El Chaparrillo actúa a su vez como espacio de conservación ex situ de esta especie protegida por el catálogo Español de especies amenazadas y por la lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, y que está catalogada como ‘en peligro de extinción’ en otras comunidades autónomas que ya han puesto en marcha planes para la recuperación de la especie.
El declive continuado de esta especie, que ya ha desaparecido de muchas provincias españolas se atribuye principalmente a la mortandad asociada a la afanomicosis, pero también a los cada vez más prolongados períodos de sequía estival, a la contaminación de las aguas o a las alteraciones y destrucción de cauces y vegetación de rivera.
