‘El sex-appeal del vino’ reunirá en FENAVIN a destacados periodistas y personalidades del mundo de la cultura

‘El sex-appeal del vino’ es el título de la mesa redonda que reunirá a destacados periodistas y personalidades del mundo de la cultura el próximo día 13 de mayo, en el marco de FENAVIN-2015, una mesa organizada por Emprendedores 2020, dentro de las actividades que en esta edición patrocina Banco Santander.
cuerda
Y bajo ese título, no es de extrañar que para la mayor parte de los ponentes el vino sea sinónimo de placer. Así, lo entiende el periodista Fernando Jáuregui, responsable de moderar la mesa, y también el director, guionista y productor de cine, José Luis Cuerda, y el periodista y bodeguero Víctor de la Serna, quienes además compartirán mesa con el empresario Patricio Cruz para quien los lazos con el vino tienen un sentido más paternal, pues lo siente como un hijo al que le tiene mucho cariño, y del que espera incluso la perfección, según sus propias palabras. Además, como caras responsables de Banco Santander, Lorena Ruíz nos acercará la visión financiera del mundo del vino, junto a Victor Arjona Muñoz, director de zona de Ciudad Real.

De forma concreta, para Jáuregui “el vino tiene unas propiedades sensuales que son realmente importantes”, y en este sentido destaca que hay pocos ‘alimentos’ más completos que el vino, por el aroma, por la propia textura, por el color, en definitiva, por toda la estética que le rodea, “de la que hemos sabido rodear a un producto histórico, bíblico, pues el vino está en la historia de la humanidad y tiene, por tanto, componentes culturales muy importantes”.

Por su parte, Cuerda señala que él personalmente no uniría el vino con el sexo precisamente pero sí con los placeres del paladar, el olfato, la vista, de los sentidos en definitiva, aunque de todos ellos destaca el paladar porque “por así decirlo fue para lo que se inventó, para beberlo”.

El periodista y bodeguero Víctor de la Serna va un poco más allá y subraya que, aparte de placer, el vino es sinónimo de amistad, convivencia y salud, mientras que para Patricio Cruz el vino es además sinónimo de cultura, de tradición, y de disfrute.

Todos ellos repiten presencia en FENAVIN, “una feria que hace una labor de difusión de marcas y difusión de la cultura del vino en general muy muy importante, tanto comercialmente, económicamente como social y culturalmente”, destaca Jáuregui, mientras para Víctor de la Serna “FENAVIN constituye una de las actividades comerciales más importantes del sector del vino en España y con mayor proyección internacional, presentando además un interesante equilibrio entre el aspecto comercial y cultural”.

Patricio Cruz, por su parte, entiende que FENAVIN “es uno de los aciertos más grandes de la Diputación” y considera que una zona como La Mancha que es la primera productora del mundo debe dar a conocer sus vinos porque cada año se está mejorando la calidad de los mismos, “y creo que somos muy competitivos a nivel mundial”. Sin embargo, para Cruz el gran problema de nuestra región es la comercialización, “no sabemos darnos a conocer y nos sabemos dar el valor que realmente tienen nuestros vinos”, de ahí la importancia de una feria como FENAVIN que “además ha adquirido una proyección a nivel internacional, y de la que, por tanto, debemos sentirnos orgullosos”, destaca.

El vino y el cine

El vino ha estado presente como argumento a lo largo de la historia del cine, tratando de forma concreta las vendimias y todo el mundo que rodea a este producto, destaca Cuerda, quien mantiene unos lazos muy estrechos con el sector, pues tras el rodaje de ‘El bosque animado’ y ‘La lengua de las mariposas’ se quedó tan enamorado de la zona que compró un bodega en Gomariz. Un edificio del siglo XVI que ha restaurado y en torno al que ha reunido un total de 10 hectáreas; un lugar que, según reconoce, le hace muy feliz, y al que acude siempre que puede.

De ahí, que Cuerda agradezca la existencia de FENAVIN porque “para todos los que nos dedicamos a esto, acontecimientos de este tipo nos ofrecen la posibilidad de reunirnos para intercambiar impresiones y encontrar términos de comparación: cómo ha ido la vendimia ese año, qué se espera del vino, qué vamos a hacer, etc.”. En definitiva, señala, “me parece que FENAVIN hace un trabajo absolutamente excepcional, y yo agradezco su existencia porque las veces que he ido la verdad es que me ha sido muy útil y me lo he pasado muy bien”, concluye.

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