Misión Humanitaria está presente en Jugarama, que se celebra hasta 30 de diciembre el recinto ferial, con un stand informativo en el que, además de recoger peluches para su campaña solidaria, da a conocer los proyectos que sustenta esta ONG. Gran parte de estos peluches acabarán en manos de los niños que habitan en la zona más pobre de República Dominicana, junto a la frontera con Haití.
José Antonio Morales, de Misión Humanitaria, explica que la campaña de donación (del 1 de diciembre al 6 de enero) es de peluches, aunque también se aceptan otro tipo de juguetes. «Principalmente peluches porque son más fáciles de transportar, pesan menos y, aunque sean de segunda mano, la mayoría suelen estar nuevos». Se da la circunstancia de que los donantes no suelen aportar un peluche, comenta, sino que «traen un saco». En total, llevan recogidos alrededor de 10.000, prácticamente la mitad donados por la conocida campaña del bolígrafo solidario Un juguete, una ilusión. A esta iniciativa también han contribuido el BM Caserío, el CD Las Casas, varios colegios de Ciudad Real, Protección Civil o la Biblioteca de Saceruela, entre otros colectivos y entidades. «La gente se vuelca con la campaña», reconoce Morales.
Los peluches no sólo viajarán a República Dominicana, ya que Misión Humanitaria también colabora con otras ONG. Por ejemplo, reservan una partida para cuando los estudiantes de magisterio acuden a realizar sus prácticas al Sahara. Asimismo, este año los peluches llegarán el Día de Reyes a los mayores que viven en residencias, para que también reciban un regalo en una fecha tan señalada.
