Sonia Mª González Martínez, técnico del Museo López Villaseñor.- A comienzo de los años ochenta, fruto de su pasión por el arte, la música y la poesía, Villaseñor llevará a cabo la ejecución de su serie de homenajes, dedicados a los artistas que influyeron de alguna manera en su trayectoria artística.
Entre estas obras se encuentra el cuadro Homenaje a Juan Alcaide de 1981, Juan Alcaide fue un poeta manchego, que nació en Valdepeñas y en sus versos ensalzará de forma apasionada las costumbres y el carácter de sus paisanos.
En este homenaje Villaseñor a través de los objetos que identifican su pintura le brinda su admiración. Entre montañas y piedras de ensueño deja que el laurel y los membrillos se impongan como símbolo de perdurabilidad, de triunfo, como ha sido su poesía, frente al delicado mantel roto que representa lo truncado de su vida, por su muerte precipitada por tuberculosis a la pronta edad de 44 años.
Villaseñor conoció muy bien la trayectoria del poeta, envuelta en doloroso silencio y quiso hacer “poesía luminosa”, versos con tanto sentimiento como los que escribió el poeta Juan Alcaide.
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Me gustan los «Membrillos en Jarraquemada». Gracias Sonia por descubrir a un artista de nuestra ciudad. Gracias también a Jesús. Tanto monta monta tanto