Los quintos del 77 de Aldea del Rey celebran su cuarto encuentro de convivencia

Herminio Sobrino López.- Los “Quintos del 77” de Aldea del Rey, celebraron este sábado, día 21 y por cuarto aniversario su día de convivencia, aquellos quintos que fueron alistados en aquella época y que nacieron en los años 1957y 1958, se dieron cita en la Plaza del pueblo para organizar y vivir un día lleno de recuerdos y anécdotas, partiendo desde el municipio hasta el conocido paraje de “El cortijillo”, muy cerca del Castillo de Calatrava la Nueva y próximo a la antigua estación de ferrocarril de Hernán Muñoz, (en este mismo lugar es celebrada la fiesta de San Isidro Labrador donde todos los Aldeanos lo celebran con gran devoción).
quintos1
La casa de labor esperaba al grupo del “77” para celebrar este día como se merece, los saludos y abrazos entre aquellos que no se veían desde hace tiempo fue emocionante, mientras charlaban unos y otros en una emotiva tertulia, los cocineros escogidos para tal fin preparaban el almuerzo a base de panceta asada, un tentempié de productos de la tierra regada con el buen vino de la cooperativa aldeana, había que coger energías, el día era largo. Mientras surgían las anécdotas que cada uno pasó en la “Mili” el maestro de la cocina Cándido Pardo Barba preparaba un suculento arroz con bogavante al estilo MasterChef, una vez terminado el caldero todos a una hincaron el diente dándole al chef una buena nota.

quintos5

Así transcurrió el día con un paseo por aquellos parajes preciosos que nos regalaba el recinto, visitando el arroyuelo y la fuente donde antiguamente se celebraba San Isidro, también visitamos la casa de la antigua estación, etc. Salvador inmortalizaba con su cámara de fotos los momentos más entrañables de la jornada.

Lejos quedaban aquellos días cuando los quintos celebraban a su manera el repertorio refranero recorriendo las calles del pueblo, sus canciones en las esquinas formaban parte del acervo cultural del pueblo. Eran “Chascarrillos” muy simples en los que contaban los sucesos que habían ocurrido en el pueblo durante el año de forma un tanto satírica; también había canciones picantes, otras hablaban de la belleza de sus “Quintas”, sobre ellos mismos.

quintos4

Mientras pendoneaban por las calles, paraban a toda persona que pasaban por allí, les pedían colaboración económica para pagar la quinta a cambio de un trago de la bota de vino. Lo recaudado servía de ayuda para iniciar su diversión en ese paraje maravilloso de “El Cortijillo”, con picardía también escribían con pintura frases en las paredes de las casas, eran dirigidas a todos los lugareños que habían tenido alguna anécdota de interés.

Encantados de la experiencia vivida, se propuso repetir este hábito y quedar para una nueva ocasión, eso sí, había que darles participación a las esposas de los quintos para compartir esta convivencia, entre otras razones para darle la oportunidad de conocer mejor esas historias de la “Mili” y darles participación a los que no pudieron asistir.

“VIVAN LOS QUINTOS DEL 77”

quintos7quintos3quintos2

Relacionados

1 COMENTARIO

ESCRIBE UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img