Callejas: “El Gobierno de Sánchez insinúa que el que quiera libertad educativa debe pagarla y que, por lo tanto, la libertad es cosa de ricos”

Juan Antonio Callejas, diputado nacional electo del PP por la provincia de Ciudad Real, se ha referido al ataque a la educación concertada por parte de la ministra de Educación en funciones del Gobierno de Pedro Sánchez y ha lamentado que haya insinuado que el que quiera libertad educativa se la pague y que, por lo tanto, “la libertad es cosa de ricos”.

En su primera rueda de prensa como diputado nacional electo, ha defendido los derechos de los padres de los más de 47.000 alumnos que han elegido la educación concertada en nuestra región –entre los que se encuentra Emiliano García-Page- y los 9.000 de la provincia de Ciudad Real. Según ha destacado, se trata de un derecho recogido en el artículo 27 de la Constitución Española que ha sido atacado por la ministra en funciones de Educación al asegurar que “de ninguna manera puede decirse que el derecho de los padres y madres a escoger una enseñanza religiosa o elegir un centro educativo podría ser parte de la libertad de enseñanza”.

Así, ha recordado que la Constitución ampara que el dinero de los ciudadanos se invierta en centros de educación pública concertada para respetar el ideario de muchos padres tanto si quieren colegios religiosos como si no. Además, ha indicado que, en Ciudad Real, entre los 33 centros públicos concertados, hay muchos que no son religiosos y si de iniciativa personal o de cooperativas de profesores, por lo que ha lamentado que los socialistas “quieran eliminar este tipo de educación y obligar al pensamiento único”.

En Castilla-La Mancha, según ha destacado el diputado nacional electo, la educación concertada da trabajo a unos 3.500 profesores y, además, supone un ahorro de unos 130 millones de euros.

Esta situación es, en su opinión, “un ejemplo de lo que se nos viene encima si triunfa el pacto entre el PSOE de Sánchez y la extrema izquierda de Podemos y Pablo Iglesias, un ataque frontal a las libertades”. Considera que el Gobierno de España “no puede depender ni independentistas, ni de comunistas, en definitiva, de los que quieren acabar con las libertades, subir los impuestos y llevarnos a la ruina, como en Venezuela”.

Por ello, y en nombre del PP, ha exigido a Sánchez que renuncie a Podemos “ya que, si renuncia, estaríamos dispuestos a contemplar otras opciones, opciones que hoy no son posibles porque Pedro Sánchez no ha respondido a la llamada de Pablo Casado”.

Además, ha recordado que Emiliano García-Page gobernó en Castilla-La Mancha mano a mano con Podemos y ha lamentado que ahora se atreva a pronunciarse en contra del acuerdo de Sánchez con Iglesias. En su opinión, “no es la hora de los oportunistas, es la hora de los políticos responsables, de hombres de Estado”.

Considera Juan Antonio Callejas que el auténtico ejercicio de responsabilidad sería buscar acuerdos con el PP en materias tan importantes como la educación, la sanidad, la economía o la unidad de España “y no echarse en los brazos de la extrema izquierda y de aquellos que quieren romper nuestro país”.

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7 COMENTARIOS

  1. Es que un gobierno DEBE defender la educación pública ante la privada y, sobre todo, la concertada.

    EL artículo 27 de la Constitución recoge que todos los españoles tienen derecho a educación. Y eso no se puede cumplir si el Estado da más dinero a los concertados que a los públicos.

    Por supuesto que todo el mundo tiene el derecho de elegir qué educación quieren que tengan sus hijos. Pero o la eliges pública y la pagas indirectamente con tus impuestos o la eliges privada y la pagas directamente de tu bolsillo. Lo que no es viable es que se destine más dinero a la concertada «porque supone un ahorro» mientras dejan que la pública se desmorone.

    «Supone un ahorro de unos 130 millones de euros».Eso es lo que hicieron los recortes:quitar dinero a la escuela pública y dárselo a la concertada. ¿Merece la pena sacrificar una escuela por otra?

    Creo que debemos ser más lógicos en este aspecto.

  2. Una plaza en la concertada, religiosa o no, cuesta menos de la mitad que en la pública.

    Y satisface la libertad de elección de los padres consagrada en el 27.3 de la Constitución.

    El fracaso de la educación pública es consecuencia de una nefasta ley, la LOGSE, y de su politización.

    Su lamentable situación no se debe a la falta de recursos, pues ahora hay encima una crisis demográfica, sino a que su dirección y filosofía están erradas. Se ha cedido ante un igualitarismo nefasto que iguala por debajo el nivel, perdiéndose la excelencia.

    Nada que ver como cuando se aplicaba la anterior ley.

    Ha sido la izquierda quien se la ha cargado.

  3. Lo único que nos queda en este país por hacer es que la religión (sea la que sea) se imparta en los propios centros de cada una, no en las escuelas.

    Si hablamos de inversiones, lo que un gobierno decente de izquierdas debería haber hecho, desde la época de Felipe González, es presupuestar suficientes centros públicos para que nadie que no quiera ir a una concertada, no tenga que hacerlo por falta de oferta pública.

    Lo que no se puede hacer es lo que hace la Comunidad de Madrid, o ahora la andaluza, que es sacar solamente nuevas plazas concertadas para los amigotes.

    Las Concertadas, como denuncia este tipo del PP, ya son un filtro para todas aquellas familias sin recursos que no pueden pagar las altísimas cuotas de sus Ampas. Que no nos engañen. Es el Partido Popular el que convierte lo que debería ser público en algo privado, privativo y elitista.

  4. Si alguien, como ocurre con la Sanidad, quiere pagarse algo privado tiene libertad de hacerlo, eso es lo que dice la Constitución, pero evidentemente no con el dinero de todos. La concertada, educación privada pagada con impuestos, debería ser erradicada. El problema es que no hay dinero y por eso sigue existiendo.

    • Sí la pública fracasa el éxito es de la concertada.

      Aquí parece que casi nadie se cuestiona por qué hemos pasado de una educación pública que era un éxito por su excelencia a una educación pública para que se formen los niños en la mediocridad.

      Y mientras que eso no cambie, gracias a Dios los padres podemos constitucionalmente sufragar también con nuestros impuestos y cuotas privadas la educación concertada.

      Porque los padres de la concertada también pagan impuestos!!!!!!!

      Y además sus cuotas.

      Y todo porque hay muchas razones para desconfiar de la educación pública porque se la han cargado.

      Sí el sistema no es exigente, si se iguala por abajo, a la pública irá el que no puede evitarla.

      Y esa situación va a perdurar porque existe un gran interés de la izquierda en adoctrinar desde la escuela pública, otra causa de su bajo nivel.

      La educación no se politiza.

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