Un belén para la esperanza en el centro de transeúntes de Puertollano

Alberto Sánchez.– Como cada año desde su apertura en 1998 el centro de transeúntes Virgen de Gracia de Puertollano acoge en su sala de reuniones el tradicional Belén, cuyas figuras y elementos han sido realizados por las personas que han tenido estancia en el centro.

Este belén es un recuerdo viviente, un hálito de esperanza y una prueba de trabajo bien hecho por parte de todas las personas que durante tantos años han permanecido en el centro de la localidad minera.

«Invitamos a todos los pequeños de distintas asociaciones y colegios para que vean la Navidad desde un punto más humano y no tan consumista», ha señalado la directora, sor Petra Martínez.

Situado en el barriada Fraternidad de Puertollano, el centro de transeúntes iniciaba su actividad al filo del comienzo del siglo XX siendo regentado por Caritas Diocesana. Actualmente tiene capacidad para 17 usuarios: 15 hombres y 2 mujeres. 

Alentar a las personas a dejar la calle, tratar de independizarlos mediante la actividad laboral o ser centro de acogida temporal para personas movidas por la actividad agrícola son dos de los proyectos base que este centro asume y afronta cada día en su andadura.

De lunes a viernes, en horario de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 19.00 horas, se realizan distintos talleres de manualidades, jardín o memoria, entre otros muchos, que ayudan a los usuarios psicológica y socialmente.

La directora del centro anima a todas las personas que quieran a visitar las instalaciones durante los 365 días del año para comprobar de primera mano el trabajo y la realidad social que se vive en el centro. De hecho, no han faltado voluntarios para realizar juegos y talleres con los usuarios, aunque la falta de voluntarios se viene incrementando en los últimos años. 

En definitiva estas personas «no son un problema, tienen un problema», concluye Martínez.

Relacionados

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img