Comunicado: Hermana, yo sí te creo

Asamblea Feminismos.- En el Juzgado de Ciudad Real se juzga estos días a un acusado por un presunto delito de agresión sexual y otro de amenazas por obligar a una joven que conocía a mantener relaciones sexuales en Porzuna (Ciudad Real) bajo amenazas de difundir en las redes un vídeo de una relación anterior consentida.

Desde Asamblea Feminismos queremos manifestar nuestro profundo rechazo a que sea considerado el testimonio de una detective que investigó y siguió a la chica, como si ella hubiera cometido algún delito. Es inconcebible que se quiera sugerir que por el hecho de querer seguir con su vida se reste credibilidad a su relato.

En primer lugar, los daños causados por el estrés postraumático que esta joven sufre no son tan visibles y evidentes como puede ser el efecto de una lesión física. En segundo lugar, la investigación de la detective podría sugerir  que  una mujer que ha sufrido una violación no tiene derecho a una recuperación. En tercer lugar, utilizar un seguimiento sobre la vida privada de una mujer que ha denunciado una agresión sexual puede encerrar un discurso gravísimo: que su comportamiento justificaba la agresión.

Utilizar argumentos tan indignantes como que la chica no pidió ayuda o que no se resistió ni hubo rastros de violencia es algo que refleja una gran ignorancia sobre los mecanismos de reacción ante una situación traumática, además de provocar una revictimización.

Otro argumento vergonzoso es utilizar el consentimiento en relaciones previas o que ella acudiera “voluntariamente” a la cita. Tenemos que volver a recordar que SIN UN SÍ ES UN NO y algo tan obvio como que tenemos derecho a negarnos a mantener relaciones sexuales en cualquier momento, y que este derecho tiene que ser respetado.

¿Por qué no se le da más importancia al informe del Equipo Psicosocial del Instituto de Medicina Legal, que da plena credibilidad a su testimonio y dice que no miente?

Nos preocupa, además del sufrimiento añadido que ha debido suponer para la chica escuchar argumentos tan vergonzosos e injustos, que estos mensajes sigan calando en la sociedad. En España las mujeres denuncian una violación cada cinco horas, y esto es sólo la punta del iceberg de una realidad sigue silenciada. ¿Qué mensaje estamos transmitiendo a las víctimas de abusos sexuales que dudan si denunciarlo o no tras lo que se está escuchando en este juicio?

Y por último, nos gustaría lanzarle a ella un mensaje de cariño y apoyo: recuerda, no estás sola. NOSOTRAS TE CREEMOS.  

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