Por José Belló Aliaga
En la Biblioteca Pública Eugenio Trías, en el Parque de El Retiro, ha tenido lugar la presentación del libro Voces perdidas, voces olvidadas. Ciclo literario para la recuperación de la memoria de escritoras de habla hispana, cuya coordinación han llevado a cabo Maria Isabel Castro y Roberto J. Martín.






En el acto, presentado y coordinado por el poeta Antonio Portillo Casado intervinieron también ambos coordinadores de la obra, Maria Isabel Castro, escritora y autora y Roberto J. Martín, poeta y autor.
Presentación del libro Voces perdidas, voces olvidadas, de Ediciones del Genal, coordinado por Maribel Castro y Roberto J. Martin, en la Biblioteca Municipal Eugenio Trías de El Retiro de Madrid
Antonio Portillo Casado
Antonio Portillo Casado, durante su disertación comentó: “Voces perdidas, voces olvidadas es un texto amplio, un estudio e investigación serios de lectura accesible con una portada bella. En el prólogo Aurora Gámez Enríquez dice: “Voces perdidas, voces olvidadas contribuye a poner en valor las raíces de la intelectualidad femenina, biografías míticas, históricas y literarias, lo que Saron Keefe Ugalde en su estudio En voz alta denomina la herencia matrilineal tan invisible a lo largo de la historia”. Estas palabras lo resumen todo. El libro consta de cinco capítulos, a saber, los siglos XV-XVI, XVI-XVII, XVIII, XIX y primer cuarto del siglo XX. El texto ha sido coordinado y compilado por Maribel Castro y Roberto J. Martín, cuyas ponencias junto a las de otros colegas (sus nombres pueden encontrarlos en la solapa del manual que nos lleva) han permitido fijar el perfil de cada autora olvidada”.
“Estamos ante un libro pionero que aborda el problema de una forma concreta con el ánimo de rescatar las vidas y obras de muchas mujeres literatas hispanas silenciadas, no citadas y obviadas de los textos donde sí aparecen sus compañeros hombres. No cabe duda de que el patriarcado imperante, la religión y el poder sesgaron su libertad de creación, talento y proyección, en definitiva, su destino como ser humano. En general, estas escritoras contaron con el apoyo de sus familias, de alta posición, para que su formación estuviera a la altura del estado social al que pertenecían, aunque esa formación estuviera lastrada por los condicionamientos sociales y políticos de la época en que vivieron. Lo cual no fue óbice para que alguna de ellas pusiera su determinación personal y astucia a fin de estudiar, ser eruditas y magníficas escritoras e incluso poder publicar sus obras en vida o post mortem con la ayuda de familiares y amigos. Mujeres que se enfrentaron al poder patriarcal, al Estado, a la sociedad y la Iglesia (donde, paradójicamente, ingresaban como monjas para seguir escribiendo y publicando casi sin traba alguna salvo excepciones). Esta obra rescata de una especie de damnatio memoriae a otras muchas escritoras desconocidas que osaron traspasar la línea roja del establishment. La sensación que surge cuando se termina de leer y analizar este estupendo trabajo equivale a una lenta sacudida por el enorme sufrimiento que, a lo largo de la historia y más concretamente en la historia de nuestro país, han sufrido las mujeres”.
“Desde hace tiempo la sociedad pugna por un mundo en igualdad y sin discriminación hacia la mujer, lo sabemos y apoyamos, pero al leer en el libro, entre sus páginas, las semblanzas y obras, así como al visualizar las imágenes de esas mujeres, es más notoria la injusticia secular contra ellas por el simple hecho de querer ser personas formadas y desarrollar una carrera literaria o de cualquier tipo, tal y como sí la realizaron los hombres. Esto oprime la razón y el espíritu provocando un grito mayor. Sabíamos, hemos estudiado a algunas literatas que aparecen en el citado texto, pero no habíamos leído ni visto impreso nunca el nombre y los trabajos de la mayoría de ellas. Por ello, al finalizar la lectura del libro, se puede comprobar la dimensión de la penumbra en la que moraban y la excelente calidad de sus obras que no han sido tenidas en cuenta en manuales de literatura, en los textos, en las políticas educativas ni en los centros docentes para reconocer su esfuerzo, valía y pensamiento de forma que sirvan de ejemplo a chicas y chicos en las aulas y a la sociedad en general. Y todo este asedio y dolor es a consecuencia de haber nacido y ser mujer. Nos han ocultado a todos la existencia de un importantísimo grupo de seres humanos, las mujeres escritoras, que necesitaban, como sus compañeros, dar a conocer su pensamiento, obra y vida. Aún hoy existe esta rémora, la discriminación de las mujeres, aunque actualmente tienen plena libertad para estudiar, pensar, escribir y publicar, etc. “
Sinopsis
Voces perdidas, voces olvidadas se inició como un ciclo de charlas-conferencias, coordinado por Maribel Castro y de Roberto J. Martín, donde intervinieron varios filólogos e historiadoras e investigadores malagueños, que dieron lugar a la recopilación de los trabajos que conforman este libro. En este volumen se reúne y actualizan con la idea de ponerlas en valor, 36 biografías/antologías de escritoras en lengua hispana desde los siglos XV al XX. Todas las autoras reseñadas, algunas de ellas sobradamente conocidas, como Teresa de Jesús, Rosalía de Castro o Carmen Conde, otras absolutamente desconocidas para el gran público, superaron las dificultades de una cultura patriarcal y androcéntrica, llegando a editar y a ser autoras de pleno derecho. Muchas de ellas han estado ausentes durante siglos en los grandes relatos culturales. Al hacer una Historia desde la perspectiva, silenciada durante siglos, de la obra colectiva de las escritoras, se conforma otra historia, esta de carácter matrilineal, donde se revela y visibiliza el papel activo que tuvieron estas mujeres.
Nuestra Historia comienza con escritoras de los XV-XVI (Florencia Pinar, Isabel de Vega, Leonor Ovando, Luisa Sigea, María de San José Salazar y Teresa de Jesús); continúa siguiendo con los siglos XVI-XVII (María de Zayas y Sotomayor, Ana Caro Mallén de Torres, Catalina Clara, Rodríguez de Guzmán, Cristobalina Fernández de Alarcón, Feliciana Enríquez de Guzmán, Juana Josefa de Meneses, Luisa María de Padilla, Leonor de la Rúa Cueva y Silva, Marcial Belizarda, María Egual Miguel, sor Juana Inés de la Cruz, Violante Do Ceo y sor Gregoria Francisca de Santa Teresa); avanza con las autoras del siglo XVIII (María Gertrudis de Hore, sor Ana de San Jerónimo, María Joaquina de Viera y Clavijo, Rosa María Gálvez de Cabera y Margarita María Hickey Pelizzoni; se prolonga con las autoras del XIX (Vicenta Maturana y Vázquez, Gertrudis Gómez de Avellaneda, Emilia Pardo Bazán, Patrocinio de Biedma y la Moneda, Rosalía de Castro y Mercedes de Velilla y Rodríguez) y culmina con poetas y escritoras del siglo XX (Blanca de los Ríos Nostench, Carmen Conde Abellán y María Teresa León Goyri).
Casi todas ellas ausentes en la historia de la literatura enseñada desde los centros educativos y excluidas de libros de texto y por tanto menospreciadas en el canon literario durante muchísimo tiempo. En este siglo, donde hemos alcanzado como conquista la necesidad de visibilizar el trabajo femenino en todos los ámbitos sociales y artísticos, este trabajo se presenta como una apuesta de enorme valor e incidencia.
Las biografías de las diferentes autoras han sido elaboradas por Rocío Biedma, María Isabel Castro Rivera, Antonio García Velasco, Antonio Gómez Hueso, Ricardo Hernández Diosdado, Agustín Hervás Cobo, Herminia Luque Ortiz, Roberto J. Martín González, Francisco Mateos Muñoz, José Olivero Palomeque, Antonio Porras cabrera, María Ángeles Pulido González, José Francisco Romero, Antonio José Royuela García y José Sarria Cuevas.
María Isabel Castro Rivera
María Isabel Castro Rivera. Natural de Colmenar (Málaga. Diplomada en Ciencias de la Salud, especialista en Obstetricia y Ginecología (Matrona).
Aunque optó por las ciencias, siempre ha sido, y es, una enamorada de las letras. La investigación es una de sus pasiones. Uno de sus últimos trabajos ha sido recuperar las voces de mujeres literatas españolas olvidadas en la historia. Ha presentado, coordinado y es de su autoría, el evento literario Voces Perdidas, Voces Olvidadas. Editado recientemente por Promotora Cultural Malagueña y coordinado por Ediciones del Genal. Actualmente inmersa en un estudio de investigación sobre mujeres literatas en torno a la generación del 98.
Es miembro del grupo literario Calíope, Asociación Ígneo Bib Azahar.
Además de la poesía, también cultiva otros géneros literarios como el relato y la biografía. Publica en revistas de ámbito cultural españolas. Sus poemas aparecen en antologías varias. En la revista (35) de ámbito internacional Álora, la Bien Cercada aparece uno de sus trabajos.
Roberto J. Martín González
Roberto J. Martín González . Nacido en Málaga, marzo 1946. Estudios: Dirección Empresas Turísticas; Decorador de Interiores. Ocupación Profesional : dirección en la empresa privada.
Publicaciones : Mi juventud (1965), Horizontes (1966), Sensaciones (2/1967), Poesía al alma (11/1967), Retazos (2018, diseño impresión y distribución por ALIAR Ediciones).
Gestor de eventos culturales, creador de Encuentro Poético de Álora y Hablando de Poesía. Pertenece a diversas asociaciones culturales de España e Hispanoamérica, cooperando con emisoras de radio y alguna revista de México y Argentina, así mismo con revistas de poesía de España. Cooperante en organizaciones de solidaridad.
José Belló Aliaga
Pies de foto
Foto 1: Antonio Portillo Casado, Maria Isabel Castro y Roberto J. Martín
Foto 2: Antonio Portillo Casado, poeta, que presentó y coordinó el acto
Foto 3: Roberto J. Martín, poeta, autor y coordinador de la obra presentada
Foto 4: El libro presentado
Foto 5: Maria Isabel Castro, escritora, autora y coordinadora de la obra presentada
Foto 6: Antonio Portillo Casado, Maria Isabel Castro y Roberto J. Martín