El subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, David Broceño, ha participado en el acto institucional por la festividad de Nuestra Señora de la Merced, patrona de las instituciones penitenciarias, celebrado en el centro penitenciario de Herrera de la Mancha.
El subdelegado del Gobierno ha destacado tres valores esenciales de la institución: dignidad, seguridad y reinserción, “el mandato constitucional que guía a nuestras prisiones y el compromiso diario de quienes dan la cara, cada turno y en cada programa”.
Reconocimiento
En su intervención ha reconocido a Marceliano García-Catalán, quien se ha jubilado tras más de una década de liderazgo en el centro: “Gracias por tu ejemplaridad y por haber conducido esta casa durante más de doce años con criterio, humanidad y resultados”.
Del mismo modo, ha dado la bienvenida a la nueva directora, María José Muñoz, destacando su “carrera hecha desde la base y su idea moderna de dirección, con equipos cohesionados y foco en la reinserción”.
David Broceño ha puesto en valor el trabajo del personal penitenciario: “Mujeres y hombres que haceis posible lo imposible: garantizar la seguridad y, al mismo tiempo, abrir puertas a la reparación y a la segunda oportunidad”, subrayando que su labor es “exigente, a menudo poco visible y no siempre reconocida”.
Inversión pública
El subdelegado ha resaltado la inversión del Gobierno de España en la reforma integral del centro, superior a 4,5 millones de euros, a la que se suma una actuación de 250.000 euros para modernizar los locutorios. Estas obras han permitido, entre otras mejoras, la instalación de duchas y agua caliente en celdas, la renovación de cocina y enfermería, la sustitución de cubiertas y la puesta en marcha de proyectos de autoconsumo fotovoltaico. “Esta inversión pública no es un capricho, es una decisión de Estado que dignifica las condiciones de vida y de trabajo, reduce riesgos y favorece la convivencia”, ha señalado.
400 personas internas y 200 profesionales
Además, Broceño ha puesto en contexto el tamaño humano del centro, que “atiende en torno a 400 personas internas con una plantilla que supera los 200 profesionales”. Ha recordado también que forma parte de un ecosistema provincial en el que el Centro de Inserción Social “Concepción Arenal”, en Ciudad Real, gestiona terceros grados y penas alternativas, con miles de ejecutorias y trabajos en beneficio de la comunidad cada año. “La reinserción no empieza el día de la libertad condicional: empieza aquí dentro, con educación, empleo, salud, tratamiento y hábitos de vida saludable”, ha afirmado.
Asimismo, ha agradecido la labor de las ONG y entidades colaboradoras, como Cruz Roja y Proyecto Hombre, por su contribución en formación, salud, mediación, cultura y deporte.
Dirigiéndose a las personas internas, Broceño ha recordado que “ninguna biografía está escrita del todo. El error cometido no borra la dignidad que les pertenece por el mero hecho de ser personas”, animándoles a aprovechar los recursos de educación, formación y tratamiento: “Aferrarse a una rutina sana hoy es abrir la puerta a una vida mejor mañana”.
Finalmente, el subdelegado ha reiterado su compromiso: “Cada vez que levanto la vista y veo este centro avanzar, veo la mejor política: la que cambia de verdad la vida de la gente y mejora la seguridad colectiva”.