La Subdelegación del Gobierno en Ciudad Real ha guardado hoy un minuto de silencio en memoria de Joana, de 53 años, asesinada en Zarautz (Guipúzcoa), y de Marta, de 21 años, asesinada en Villaverde (Madrid). De esta manera, se ha querido expresar la condena más rotunda del Gobierno de España ante dos nuevos crímenes machistas y trasladar el apoyo y el cariño a las familias y allegados de las víctimas.
El subdelegado del Gobierno, David Broceño, ha lamentado que “da igual la edad o el lugar, nadie está libre en nuestro país de esta violencia tan atroz y tenemos que luchar juntos para acabar con esta lacra”.
David Broceño ha explicado que el caso de Marta ha sido especialmente doloroso para la provincia, ya que “había estado en un recurso de acogida en Ciudad Real durante medio año y hacía poco que se había marchado. No podemos entender cómo a una chica de 21 años le arrebatan la vida de manera tan cruel delante de su bebé de apenas 15 meses”, ha señalado.
32 mujeres asesinadas y 17 menores huérfanos
Durante su intervención, el subdelegado ha recordado que “ya son 32 las mujeres asesinadas por violencia machista en lo que va de año y 17 los menores huérfanos que han quedado sin sus madres”.
Además, ha insistido en la necesidad de la implicación de toda la sociedad para detener esta violencia: “Necesitamos que nos ayudéis. Conocer y permanecer en silencio puede acabar en desenlaces fatales. Cada vecino, cada persona que sea testigo de una situación de maltrato debe denunciarlo. Pueden hacerlo llamando al 016, al 091 o al 062, incluso de forma anónima”.
Broceño ha reiterado la condena más absoluta del Gobierno de España y ha asegurado que se seguirá actuando con contundencia desde todos los ámbitos institucionales
Por último, el subdelegado del Gobierno ha hecho un llamamiento a la ciudadanía y a los medios de comunicación para que “sigan siendo altavoz y ayuda en la lucha contra la violencia machista”, subrayando que sólo con la colaboración de todos será posible erradicar esta lacra social.
Ni yo, ni mis NiNis creemos que exista ni la violencia machista ni el cambio climático.
Lo que es terrible es que haya niños víctimas de segunda categoría: aquellos cuyo padre ha sido asesinado por la madre
Y a mi que me cuentas, a nosotros nos da igual. Son violencias de género en la que no creemos.