La Asamblea Local de Cruz Roja en Almodóvar del Campo ha reforzado su capacidad de respuesta ante emergencias con la adquisición de una potente motobomba de achique, un equipo que ha sido costeado con cargo al convenio de colaboración que la organización y el Ayuntamiento mantienen en materia de seguridad y protección a la ciudadanía.
De hecho, la nueva dotación permitirá actuar con eficacia en caso de inundaciones por lluvias torrenciales o roturas de canalizaciones, cubriendo de esta manera una carencia detectada durante episodios de grandes chubascos que afectaron a algunas zonas de la localidad el pasado otoño.
La teniente de Alcalde, Carmen Santos, apela al compromiso del Ayuntamiento para contribuir a la mejora de la seguridad en la población, por cuanto “apoyamos siempre a la Asamblea Local de Cruz Roja y, como otras veces, hemos colaborado en este equipo, por si en un futuro, para actuar ante riesgos meteorológicos de grandes precipitaciones”.
Así también lo entiende el presidente de la Asamblea Local, Paco Real, quien subraya la importancia de esta motobomba en el contexto climático actual y en previsión de zonas inundables en Almodóvar del Campo, porque “ante una posible catástrofe, que ojalá no llegue nunca, esta máquina, que tiene mucho caudal, podamos actuar de forma efectiva”.
Este modelo, AY 75 KT TRASH de tipo centrífugo, es un equipo autónomo alimentado por gasolina, diseñado específicamente para trabajar con aguas sucias y, como explica Javier Martín, referente de Socorros de Cruz Roja local, “en condiciones normales puede achicar unos 83.000 litros a la hora, y si las condiciones son más dificultosas, rondaría los 50.000”.
Además, sus características técnicas y dotación de mangueras de amplio caudal y diferentes longitudes y enganches, le permiten bombear aguas con hasta un 50% de residuos sólidos y partículas de hasta 25,4 milímetros, lo que la hace idónea para situaciones de emergencia complejas.
La compra fue motivada por la experiencia vivida durante la DANA de finales de octubre del año pasado, cuando “vimos que se acumuló bastante agua en algunas partes del pueblo y, aunque no hubo grandes daños, recibimos una petición de colaboración de un vecino y fue ahí nos dimos cuenta de que era un recurso que no se tenía y que debíamos incorporarlo”, relata Martín.
Cabe recordar que ante la ausencia de una agrupación de Protección Civil en la localidad, Cruz Roja asume este papel fundamental en la gestión de emergencias, por lo que “siempre es necesario tener este tipo de recursos”, como apunta el referente para estos temas de la Asamblea Local, coordinados también por Francisco Jesús Fernández.
La inversión, cercana a los 2.000 euros, incluye la propia motobomba y sus accesorios, como dos garrafas específicas para el combustible, una manguera de expulsión de 50 metros y tres tramos de manguera de aspiración que suman un total de 27 metros, que tienen, según la organización, un despliegue “relativamente sencillo”.
Así, ante cocheras, sótanos o cualesquiera otros espacios que pudieran resultar anegados, permite rápidas intervenciones tal y como recientemente han podido comprobar en el vaso principal de la Piscina Municipal, voluntariado y personal técnico que se congregaba recientemente para realizar ejercicios de preparación.
Una jornada de formación realizada en un entorno seguro, probando sobre el terreno el enganche de las mangueras, el desplazamiento del equipo, la verificación del caudal de trabajo y otras actuaciones principales para asegurar un despliegue rápido y eficaz en una situación de emergencia real.
“Queremos que nuestros voluntarios y voluntarias estén preparados, y para eso, nada mejor que hacer estos simulacros y ejercicios como en esta instalación del Ayuntamiento”, explicaba Paco Real, valorando la total disponibilidad que para la organización muestran los responsables municipales que encabeza el alcalde José Lozano.
Este nuevo recurso se suma a otros medios que se han ido adquiriendo con anterioridad por parte de la Asamblea Local de Cruz Roja, con el objetivo de procurar una mejor acción y mayor capacidad operativa, según los estándares con que operan los Equipos de Respuesta Básica en Emergencias (ERBE) como el de esta organización en el municipio.








