La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, a través de la Fundación Tierra de Viñedos, ha organizado esta tarde una nueva cata de promoción de la cultura del vino, la número 16 de las 20 programadas para este año. Esta vez, el enclave ha sido el Palacio de Pedro I de Torrijos (Toledo) donde se han inscrito más de 115 personas, habiéndose colgado el cartel de ‘completo’.
La directora general de Alimentación, Elena Escobar, ha destacado que esta actividad se enmarca dentro de la acción impulsada por la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural que dirige Francisco Martínez Arroyo a través de la Fundación Tierra de Viñedos de Castilla-La Mancha, con la colaboración de la Organización Interprofesional de Vino de España y que tiene como objetivo fomentar la cultura del vino y dar a conocer los vinos de Castilla-La Mancha. Desde 2019 se han realizado más de un centenar de catas y se ha llegado a más de 4.000 personas, con el objetivo de llegar al público y dar a conocer la cultura del vino y “aumentar su consumo siempre de forma responsable y moderada”.
En esta tarde noche la cata ha estado conducida por Ana Pecero, del Colegio de Enólogos de Castilla-La Mancha, y se han podido probar vinos de la DO Ribera del Júcar, la DO Méntrida y la DO Valdepeñas, tres de las nueve denominaciones vínicas con las que cuenta la región, además de una denominación invitada de fuera de la Comunidad, al tratarse de un convenio nacional.
Junto a Escobar, ha estado el alcalde de la localidad, Anastasio Arevalillo; el delegado provincial de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Jesús Fernández Clemente, el director de la Agencia del Agua, José Manuel Martín, así como la directora de la Fundación Tierra de Viñedos, Diana Granados y el presidente de la DO Méntrida, Juan Alonso, entre otros.
Para la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, ha explicado Escobar, es muy importante promocionar el vino, y ha recordado que ayer mismo se presentó en Albacete un programa de promoción del vino en la restauración para que en hostelería haya más referencias de vino de la región y que se ofrezcan vinos de la comunidad a los visitantes. El del vino, ha recalcado, es un sector muy importante, que supone el cinco por ciento del PIB de Castilla-La Mancha.
La de hoy es la cuarta cata de las 20 programadas en Castilla-La Mancha este año que se desarrolla en la provincia de Toledo este año gracias al convenio entre la Consejería y la OIVE, tras las de Illescas, Talavera de la Reina y Toledo. Con esta actividad se espera llegar solo este año a más de 2.000 personas con la cultura del vino, un alimento incluido dentro de la Dieta Mediterránea, la más saludable, sostenible y patrimonio inmaterial de la Humanidad.