La Audiencia Provincial de Albacete comenzará el próximo lunes 17 de noviembre el juicio con jurado popular contra C.N.G., acusada de asesinar a su bebé recién nacido al abandonarlo en un cubo de basura, crimen por el que la Fiscalía ha pedido prisión permanente revisable.
Según detalla el escrito de acusación, la encausada, que estaba embarazada desde abril de 2022, dejó de acudir a sus citas con el servicio de Obstetricia del Hospital de Hellín desde la segunda mitad de su embarazó, faltando a los controles médicos pertinentes y comentando a su marido y familiares, quienes desconocían que estaba esperando a un hijo, que había sufrido un aborto espontáneo.
A las 39 semanas de gestación, en enero de 2023, la acusada comenzó su parto, «con pleno conocimiento de su estado», según señala el escrito de la Fiscalía, ya que la mujer había dado a luz con antelación y tenía una hija de tres años en ese momento. En lugar de pedir ayuda o asistencia médica, dio a luz en el baño de su casa, «con la intención de que nadie se enterara del nacimiento de su hijo y acabar con su vida», ha afirmado la acusación.
Después de que el bebé naciera «vivo y en buen estado de salud», la madre cortó el cordón umbilical y arrojó a su hijo al cubo de basura de su casa, donde lo dejó morir. Cuando esa noche su suegra llegó al hogar y vio el suelo manchado de sangre la presunta asesina aseguró que había padecido una menstruación muy abundante y dolorosa, por lo que su marido la acabó trasladando al hospital de Hellín. En el centro, la mujer negó reiteradamente haber estado embarazada o haber dado a luz. El recién nacido falleció esa noche por un fallo cardiorrespiratorio provocado por un shock hipovolémico, hipotermia y asfixia.
La acusada se encuentra privada de libertad desde entonces, con prisión provisional decretada. El juicio comenzará el lunes en la Sala Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete con la elección de los miembros del jurado popular.
La Fiscalía ha pedido también la privación de la patria potestad respecto a su otra hija y una orden de alejamiento durante un plazo de 31 años, además de una indemnización a esta de 50.000 euros por la muerte de su hermano y al padre del bebé fallecido otra indemnización de 100.000 euros.








