Política en las aulas

Rafael RoblesEróstrato fue un anónimo pastor que perseguía la fama con obsesión enfermiza. Dada su mediocridad pensó que la única forma de ser recordado para la posteridad consistiría en un acto enormemente destructivo, así que, ni corto ni perezoso, arrasó el templo de Artemisa, una de las siete maravillas de la antigüedad.

Este artículo, tras veinticinco siglos de tamaña devastación, demuestra que fueron vanos los intentos del rey persa Artajerjes para evitar la fama de susodicho pastor, aunque amenazara con matar a quien osara hablar de él. Y es que no hay nada como derrumbar el paisaje para hacerse notar entre el paisanaje.

Pues bien, el Partido Popular de Ciudad Real, cual Eróstrato envilecido, tampoco se está labrando una fama sino a base de destrucción. No se dedican a incendiar los templos de las diosas pero sí que disfrutan prendiendo fuego a la convivencia democrática. De este modo las generaciones futuras les recordarán como los incendiarios de la paz social y los Eróstratos de las virtudes cívicas.

Y esto viene al caso porque si el PP contara entre sus filas con gente despierta habría animado a su lideresa en la oposición del Ayuntamiento de Puertollano a recorrer los centros educativos, siguiendo la estela de la alcaldesa, para explicar a los jóvenes sus propuestas para mejorar la ciudad y, sobre todo, para enfrentarse a sus incómodas preguntas y recoger críticas constructivas.

Pero no solo no es así, sino que medrado me he quedado al leer que la pepera Junta de Castilla-La Mancha trató de vetar a la alcaldesa socialista su visita a los centros educativos y —dicen las malas lenguas—  entre las triquiñuelas que se gastaron hubo amenazas que prefiero no reproducir aquí para evitarme una querella. Está claro que los políticos con complejo de Eróstrato que campan por los fueros peperiles se sienten más cómodos destruyendo que construyendo, por lo que han sacado sus bulldozers electoralistas a la calle para arremeter contra la alcaldesa por, sencillamente, tratar de hacer bien su trabajo, es decir, escuchar a los jóvenes y explicarles cómo se trabaja en un ayuntamiento.

En el colmo del despropósito el PP no considera interlocutores válidos a los estudiantes y se limita a hacer política encerrado en un despacho para intuir o adivinar lo que quiere el pueblo en vez de interpelarle directamente; como si gobernar fuera una ciencia infusa o consistiera en quiromancias, cartomancias o tontomancias. Pero ante la desbocada estrategia peperrealeña o puertopepera no acierto a comprender por qué no pusieron el grito en el cielo cuando en otras ocasiones políticos del PP de regiones más desarrolladas y con mayor talante democrático visitaban a los estudiantes para charlar sanamente con ellos.

A  ver si aprenden de una vez que los institutos son centros de educación para la democracia en los que políticos, científicos, escritores, obispos y artistas son muy bien recibidos siempre que no traten de manipular a los jóvenes.

La antorcha de Diógenes
Rafael Robles
http://www.rafaelrobles.com
@RafaelRob

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9 COMENTARIOS

  1. Pues yo preferiría que visitasen los servicios públicos no para cagar, sino para que se caguen en ellos. Y tampoco estaría mal una buena ofrenda de pepinos y tomatazos, porque este año la cosecha promete ser magnífica.

  2. Dicho lo cual, me congratulo de que algún político se pasee para ver el panorama; igual escuchan algo, suponiendo que escuchen, que ya decía Maquiavelo que hay dos tipos de príncipes, los que escuchan y los que no.

  3. Más razón que un santo tenéis los dos. Y no pongo más que aparecerán los dos trolls que me persiguen por MCR a «enmierdar» el artículo de Robles.

    Mucha salud y mucha República!

  4. Tremendo. Toma una acusación de la oposición como noticia cierta, dimes y diretes como hechos reales y, a partir de aquí, trata de reforzar su teoría que, realmente es un prejuicio que tiene a priori y que nada le hará cambiar, da igual lo que suceda. En fin, todo lo contrario a un un librepensador que busca en los hechos algo de verdad y no los estira o se los inventa para que su verdad sea un hecho. Lamentable.

  5. La política, mal necesario de nuestra civilización, podría definirse como el arte de bien mentir. Las mentiras siempre acaban pasando factura, y ello determinó que las tornas se modificaran las pasadas elecciones. Hoy se aprecia un interés compulsivo en condenar a los que imponen el racionamiento y en exculpar a los que con un despilfarro desmedido causaron el primero.
    Claramente, tú te sitúas en la perspectiva que te sugieren tus inclinaciones políticas y hablas de lo que tienes delante, ignorando lo que hay a tus espaldas. Hay que mirar a todos lados y a poco de reflexionar, descubrimos que nos movemos entre cazos y sartenes,sobre todo en esta provincia.
    Las aulas siempre han sido semillero de ideas políticas, un arrimar el ascua a la sardina, una causa de persecuciones y exilios, en ocasiones hasta un motivo de cambio, y en varios casos un trampolín para oportunistas (de lo que en laciudad andamos bien sobrados). En el mundo académico todos los pensamientos que parten de la idea de civilización han de tener su nicho particular, incluido algo tan cuestionable como es la política en general. Es bueno conocer todas las opciones para aceptar o en su caso cuestionar; así también se configura la libre expresión, tan loable como necesaria.

    Muchas veces la formación no implica educación. Pongamos que nuestro ínclito y nunca satisfactoriamente alabado y evaluado endriago ha debido de tener un empacho de torrijas, porque los regüeldos de la ironía ya han traspasado los filos de la más meridiana grosería, dejando en aguas de borraja tanta sapiencia y miles de páginas de tesis doctorales duras de mascar como el tabaco de Virginia. En fin, poniéndome una pinza en la nariz tras tan mefítico comentario,les deseo una buena tarde.

  6. Anda y vete, Vigil, de penitencia y vigilia, para expiar tus excesos como colosal engullidor de torrijas a mansalva, y, de paso, purificar tu alma de tanto veneno esparcido sobre la honra de los columnistas; pero no eructes, no, que los fieles pueden sufrir intoxicación ante el hedor maloliente de tus vapores etílicos.
    Porque no me negarás que ese prominente barrigón que adorna tu noble perfil no crece a base de pan y agua, ¿ o sí?

    • Jajjaja ¡Qué retrato robot más exacto! No sé qué haces que no vas a prestar tus servicios a la dirección general de seguridad. Pero se te han olvidado mencionar las natillas, los buñuelos de viento, las flores de Calatrava, los barquillos de cañas de veral, los chocolates con porras druídicas, las ensaladillas rusas, las tortas de chicharra, las magdalenas esponjosas, las catas de leche condensada… Cuesta mucho mantener los michelines, enanito, pero soñar no cuesta nada, hasta pensar es gratis… ¡Atrévete, tú puedes!

      • Vigil, vigilado, qué malandrín. Abandonaste hace tiempo la edad de la inocencia y te aferras desesperado a unas travesuras maliciosas que no te corresponden ni por canas ni por corpulencia, so picarón.

        • ¡Muchacho, qué afán con enterrarme antes de hora! Me sitúas en medio de los ultrajes del tiempo con piorreas, podagras, cabelleras escarchadas y altas tasas de triglicéridos; hasta me has limitado la movididad y ya me asignas el consabido andarín.
          No te preocupes, micer enanito, llegarás al verde desvaído de mis años y para entonces habrás prescindido de tus tristes sémolas y tarugos de pan ácimo y tendrás en tu alacena el cuerno de la abundancia, y digo cuerno relleno, no te vayas a pensar, por muy hueco que te suene cuando te entren ganas de rascarte la cimera.

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