El pesaroso pero «inevitable» cierre de la última mina de Puertollano

Endesa ha culminado la restauración de los terrenos de sus cuatro históricas minas de carbón, que la compañía comenzó a explotar a partir de 1972, en los emplazamientos de Andorra (Teruel) y As Pontes (A Coruña), seguidas de las minería de Peñarroya (Córdoba) y Puertollano (Ciudad Real), en 1983, tal y como ha mostrado la empresa este viernes a través de fotografías, vídeos y la presentación del libro ‘Cuatro actuaciones ambientales en centros mineros de Endesa’. El cierre de la mina de Encasur en Puertollano ha puesto punto y final a la historia de la minería en la ciudad industrial.
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El consejero delegado de Endesa, José Damian Bogas, ha señalado que observa el cierre de las minas «con pesar pero entendiendo que es inevitable», al tiempo que ha añadido que la descarbonización de la economía para 2050 será un «proceso difícil pero también será una oportunidad».

Para conseguir este objetivo marcado por el Acuerdo de París, Bogas ha incidido en que «no basta con el esfuerzo de las eléctricas, sino que otros sectores, como el del transporte, la industria y la construcción también deben aportar».

En este sentido, ha asegurado que «sin la electrificación del transporte, la descarbonización será una utopía y la transición energética un brindis al sol».

Respecto a la recuperación de los terrenos, en total Endesa ha restaurado 5.000 hectáreas que han vuelto a su hábitat primitivo, además de haber generado otros nuevos destinados a la agricultura, con olivares y viñedos; a la ganadería, para pastoreo; y a nuevos ecosistemas forestales, al plantarse 1,4 millones de árboles.

Asimismo, estas superficies albergan ahora una media de 200 especies de fauna y 90 de flora en cada emplazamiento, según se desprende de la auditoría llevada a cabo por los biólogos Víctor y César Pedrocchi.

Estas cuatro minas han producido en toda su historia un total de 355 millones de toneladas de carbón, alrededor de cuatro teravatios a la hora y ha empleado a cerca de 5.800 trabajadores de forma directa.

Por emplazamientos, Víctor Pedrocchi ha señalado que alrededor del 70 por ciento de las especies de vertebrados que habitan ahora cada una de las cuatro minas restauradas están en peligro de extinción o amenazadas; mientras que, por su parte, César Pedrocchi ha indicado que los nuevos paisajes albergan hasta 40 Hábitats de Interés Comunitario (HIC).

EL HUECO DE LA MINA ES AHORA «EL MAYOR LAGO DE ESPAÑA»

Entre las actuaciones más llamativas, destaca la de As Ponte, donde Endesa extrajo carbón desde 1972 hasta 2007, ya que, el espacio que ocupaba el hueco de la mina se ha convertido «en el mayor lago de España: 865 hectáreas y 547 hectómetros cúbicos de agua, donde hoy se practican deportes náuticos, y hay zonas de baño y recreo», según ha asegurado la compañía.

Para los responsables de la restauración, el reto era «llevar a cabo una actuación que pudiera después desarrollarse por sí sola con la ayuda del agua», algo que, según han señalado, se ha conseguido.

Para José Damian Bogas, los trabajos de restauración de estas cuatro minas son «el ejemplo más fiel» de por dónde quiere transitar la compañía en términos de sostenibilidad y responsabilidad social corporativa.

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7 COMENTARIOS

  1. Mientras tanto, Finlandia, Noruega y Suecia están retomando la minería.
    Demuestran que es posible una industria minera amigable con el medio ambiente, con responsabilidad social y que convive con comunidades locales y otras industrias.
    Se han dado cuenta de que si explotas un yacimiento en tu país, la riqueza se queda en él.
    Hay que tomar nota….

    • Y mientras tanto, en otras regiones, aprovechan, las subvenciones, para reconvertir sus industrias, aquí, nos hemos quedado, sin minería, malgastado los fondos mineros, endeudados, y con unos gestores pésimos.
      Eso sí podemos, montar un tablao flamenco, de tantos palmeros, o un zoo, con tanta fauna, variopinta…

  2. Charles, creo que se le ha olvidado el principal problema de Puertollano, aquí, al contrario de Suecia, Noruega y Finlandia, Puertollano cada día es más una ciudad de ‘amiguismos’ y ‘amiguetes’ que una ciudad amigable, en la que lo único que impera es la gran cantidad de obras que se proyectan y siempre en 2 fases.

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