Mujeres periodistas de Ciudad Real también paran el 8 de marzo

En torno a 7.000 mujeres periodistas y fotoperiodistas de medios de comunicación, agencias y gabinetes de prensa, incluido un nutrido grupo de profesionales de nuestra provincia, han firmado un manifiesto de apoyo a la huelga feminista del 8 de marzo, en el que, además, se insta a todas las compañeras a que se sumen a la movilización en la medida de sus posibilidades y circunstancias.periodistas

Bajo el lema #LasPeriodistasParamos, el texto denuncia el machismo que, como en el resto de sectores, sufren las mujeres, pero con las particularidades asociadas a esta profesión. Asimismo, la firmantes manifiestan su preocupación por «la visión parcial de la realidad que tantas veces ofrecen los medios y en la que falta la presencia y aportaciones de las mujeres». El feminismo, aseguran, también es necesario para mejorar el periodismo.

Siete son sus reivindicaciones. Por un lado, acabar con la brecha salarial y el techo de cristal (reclaman su derecho a ocupar puestos de poder y responsabilidad), así como con la precariedad e inestabilidad laboral. Consideran que la corresponsabilidad y la flexibilidad debe ser una prioridad que las empresas deben asumir,  pues «una ausencia de conciliación real perjudica más a las mujeres, que acaban modificando o recortando sus horarios para poder cuidar e incluso abandonando su empleo o cambiando de profesión». Asimismo denuncian situaciones de acoso sexual por parte de compañeros, superiores y fuentes, además «del ninguneo, la condescendencia, el paternalismo y los mansplaining», que «están a la orden del día». Además, reprueban que los espacios de opinión y las tertulias estén «masculinizados». Por último, advierten de que la visión de la realidad que transmiten los medios de comunicación «es muchas veces parcial y está sesgada» porque no tiene en cuenta «en la misma medida las experiencias, los relatos y las vivencias de las mujeres que, a menudo, son tratadas como personajes secundarios o con estereotipos».

Por último, instan a la audiencia y a los lectores a ser cómplices de sus demandas. Este manifiesto se leerá el 8 de marzo a las 12:30 horas en la Plaza de Callao de Madrid y en los Jardines de Montserrat Roig, en Barcelona.

Relacionados

27 COMENTARIOS

  1. HUELGA SÍ….

    PERO DE FAMILIAS.

    Las realmente discriminadas e ignoradas por el Mercado, el Estado, los partidos políticos y los sindicatos.

    Hoy defender la familia (convencional o no) y analizar la realidad desde su perspectiva es lo MAS SUBVERSIVO.

    • Yo como hombre soltero, me siento discriminado en los supermercados, porque solo hay ofertas y pack ahorro familiares.
      ¡Nadie piensa en los solteros!

      Pero quien sigue cobrando menos, sufre discriminación laboral, carga con las responsabilidades de la casa…siguen siendo demasiadas mujeres.

      Tu con tal de ir en contra, dices cosas sin fondo ninguno.

      Pero es como si te estuviera viendo, seguro que eres de los que cada noche, le preguntas a tu mujer: «¿Está ya la cena?»

      • Claro, soy de derechas.

        Tú seguro has de ser mamporrero callejero o candidato a terrorista, eres de izquierdas.

        No eres más simplón porque no has nacido antes.

  2. Venga Ángel Manuel que por nosotros no sea, que conste, llama a Pedro Fernández y organizáis vuestra huelga de las familias… ánimo y suerte.

    • Esa HUELGA DE LAS FAMILIAS concentraría en la calle a muchas más personas que los activistas que mañana saldrán en la foto pero no llenarán las calles.

      Qué desconocimiento de la realidad y cuanta soberbia e ignorancia en lo de mañana.

        • Mañana muchas mujeres saldrán a la calle a manifestarse pero la mayoría no lo hará. Además, unas y otras votarán en las siguientes elecciones.

          Ya sé que es muy obvio, pero a lo mejor hay que empezar por ahí.

  3. Felicidades, más gente que se suma a algo que ya es un clamor.

    La sociedad igualitaria viene para quedarse. Basta de señoros y machirulos.

    Tenéis todo el apoyo de los hombres de verdad!!! A los otros ya les vale con avergonzar a la madre que los parió.

    Sin vosotras SE PARA EL MUNDO, se ponga como se ponga el obispo de San Sebastián, la Ministra de Trabajo y la madre que los parió a tod@s juntos, incluidos los bobos de Rivera o Arrimadas.

    Podrán hacer panfletos repugnantes y publicarlos en MCR contra vosotras y vuestra lucha, en su derecho están, pero no es más que una losa más sobre sus cabezas huecas y llenas de soberbia infantil.

    LA CALLE ES VUESTRA!!!

  4. AH, y dejaros ya de sandeces los heteropatriarcas viejunos, las familias son como cada uno/a quiere configurarla. Dos padres, dos madres, padre y madre, como a cada uno le dé la gana.

    Vuestras normas católicas, musulmanas o judías o como sean SON PARA VUESTROS SEGUIDORES, no para la sociedad española que NO TIENE POR QUÉ TRAGAR con ninguna imposición religiosa.

    El feminismo es contra las IMPOSICIONES, no es contra los hombres.

    Basta ya de esto:

    – ¿Es usted feminista?
    – No me gustan las etiquetas, por eso me declaro patriota, conservadora y españolista, que para nada son etiquetas.

    Basta ya!!!

    • JUNTAS SOMOS MÁS!

      Hoy, 8 de Marzo, las mujeres de todo el mundo estamos convocadas a la HUELGA FEMINISTA.

      Cada 8 de Marzo celebramos la alianza entre mujeres para defender nuestros derechos conquistados. Nos precede una larga genealogía de mujeres activistas, sufragistas y sindicalistas. Las que trajeron la Segunda República, las que lucharon en la Guerra Civil, las que combatieron al colonialismo y las que fueron parte en las luchas anti-imperialistas. Sin embargo, sabemos que aún no es suficiente: queda mucho por hacer y nosotras seguimos luchando.

      La sororidad es nuestra arma; es la acción multitudinaria la que nos permite seguir avanzando. La fecha del 8 de marzo es nuestra, es internacional y es reivindicativa.

      Nuestras identidades son múltiples, somos diversas. Vivimos en los pueblos y en las ciudades, trabajamos el ámbito laboral y en el de los cuidados. Somos payas, gitanas, mujeres con diversidad funcional, migradas y racializadas. Nuestras edades son todas y nos sabemos lesbianas, trans, bisexuales, inter, queer, hetero… Somos las que no están: somos las asesinadas, somos las presas, somos las que se quedaron en el mar, somos las que se quedaron en las fronteras. Somos TODAS. Juntas hoy paramos el mundo y gritamos:

      ¡BASTA! Ante todas las violencias machistas que nos atraviesan.

      ¡BASTA! De agresiones, humillaciones, marginaciones o exclusiones. Exigimos que el Pacto de Estado contra las violencias machistas –por lo demás insuficiente– se dote de recursos y medios para el desarrollo de políticas públicas reales y efectivas que ayuden a conseguir una sociedad libre de violencias contra las mujeres y niñas. Denunciamos la represión sobre quienes encabezan la lucha por los derechos sociales y reproductivos.

      ¡BASTA! De violencias machistas, cotidianas e invisibilizadas que vivimos las mujeres sea cual sea nuestra edad y condición. QUEREMOS poder movernos en libertad por todos los espacios y a todas horas. QUEREMOS disfrutar de nuestro derecho a vivir una vida libre de violencias machistas. Señalamos y denunciamos la violencia sexual como expresión paradigmática de la apropiación patriarcal de nuestro cuerpo, que afecta de modo aún más marcado a las mujeres migradas y a las trabajadoras domésticas. Es urgente que nuestra reivindicación Ni una menos: vivas nos queremos sea una realidad.

      ¡BASTA! De opresión por nuestras orientaciones e identidades sexuales! Denunciamos la LGTBIfobia social, institucional y laboral que sufrimos muchas de nosotras, como otra forma de violencia machista. Somos mujeres y somos diversas. ¡Si nos tocan a una, nos tocan a todas!

      Somos las que reproducimos la vida. El trabajo doméstico y de cuidados que hacemos las mujeres es imprescindible para el sostenimiento de la vida. Que mayoritariamente sea gratuito o esté devaluado es una trampa en el desarrollo del capitalismo. Hoy, con la huelga de cuidados en la familia y la sociedad, damos visibilidad a un trabajo que nadie quiere reconocer, ya sea en la casa, mal pagado o como economía sumergida. Reivindicamos que el trabajo de cuidados sea reconocido como un bien social de primer orden, y exigimos la redistribución de este tipo de tareas.

      Hoy reivindicamos una sociedad libre de opresiones, de explotación y violencias machistas. Llamamos a la rebeldía y a la lucha ante la alianza entre el patriarcado y el capitalismo que nos quiere dóciles, sumisas y calladas.

      Para conseguir una vida libre de violencias es preciso actuar en todos los ámbitos de nuestra vida. En Catalunya estamos viviendo una escalada de la represión: cargas policiales el 1 de octubre con denuncias de agresiones sexuales. Las feministas también estamos comprometidas en la defensa de la democracia y de las libertades en nuestro país y entendemos que la criminalización y/o la judicialización de formas pacíficas de protesta social y reivindicación política también son formas de violencia institucional que tenemos que denunciar. Por ello, denunciamos la aplicación del Artículo 155 de la Constitución española y exigimos su inmediata suspensión.

      No aceptamos estar sometidas a peores condiciones laborales, ni cobrar menos que los hombres por el mismo trabajo. Por eso, hoy también hacemos huelga laboral.

      Huelga contra los techos de cristal y la precariedad laboral, porque los trabajos a los que logramos acceder están marcados por la temporalidad, la incertidumbre, los bajos salarios y las jornadas parciales no deseadas. Nosotras engrosamos las listas del paro. Muchos de los trabajos que realizamos no poseen garantías o no están regulados. Y cuando algunas de nosotras tenemos mejores trabajos, nos encontramos con que los puestos de mayor salario y responsabilidad están copados por hombres. La empresa privada, la pública, las instituciones y la política son reproductoras de la explotación laboral de las mujeres.

      ¡BASTA! de discriminación salarial por el hecho de ser mujeres, de menosprecio y de acoso sexual en el ámbito laboral.

      Denunciamos que ser mujer sea la principal causa de pobreza y que se nos castigue por nuestra diversidad. La precariedad se agrava para muchas de nosotras por tener mayor edad, ser migrada y estar racializadas, por tener diversidad funcional o una imagen alejada de la normatividad. Reivindicamos que nuestra situación laboral nos permita desarrollar un proyecto vital con dignidad y autonomía; y que el empleo se adapte a las necesidades de la vida: el embarazo o los cuidados no pueden ser objeto de despido ni de marginación laboral, ni deben menoscabar nuestras expectativas personales ni profesionales.

      Consideramos fundamental denunciar las normas y las políticas opresivas contra las mujeres migrantes

      Exigimos también las pensiones que nos hemos ganado. No más pensiones de miseria, que nos obligan a sufrir pobreza en la vejez. Pedimos la cotitularidad de las pensiones y que el tiempo dedicado a tareas de cuidado, o que hemos desarrollado en el campo, sea reconocido en el cálculo de las pensiones al igual que el trabajo laboral y demandamos la ratificación del convenio 189 de la OIT que regula el trabajo doméstico.

      Gritamos bien fuerte contra el neoliberalismo salvaje que se impone como pensamiento único a nivel mundial y que destroza nuestro planeta y nuestras vidas. Las mujeres tenemos un papel primordial en la lucha contra del cambio climático y en la preservación de la biodiversidad. Por eso, apostamos decididamente por la soberanía alimentaria de los pueblos. Apoyamos el trabajo de muchas compañeras que ponen en riesgo su vida por defender el territorio y sus cultivos. Exigimos que la defensa de la vida se sitúe en el centro de la economía y de la política.

      Exigimos ser protagonistas de nuestras vidas, de nuestra salud y de nuestros cuerpos, sin ningún tipo de presión estética. Nuestros cuerpos no son mercadería ni objeto, y por eso, también hacemos huelga de consumo. ¡Basta ya de ser utilizadas como reclamo!

      Exigimos también la despatologización de nuestras vidas, nuestras emociones, nuestras circunstancias: la medicalización responde a intereses de grandes empresas, no a nuestra salud. ¡Basta de considerar nuestros procesos de vida como enfermedades!

      Exigimos la despenalización total del aborto, incluyendo a las menores de edad, así como su legalización y cobertura gratuita en el sistema de la sanidad pública. Repudiamos cualquier tipo de injerencia en la decisión de las mujeres sobre nuestros cuerpos. ¡Nosotras parimos, nosotras decidimos!

      La educación inicial es la etapa principal en la que construimos nuestras identidades sexuales y de género y, por ello, las estudiantes, las maestras, la comunidad educativa y todo el movimiento feminista exigimos nuestro derecho a una educación pública, gratuita, laica y feminista libre de valores heteropatriarcales e imperialistas desde los primeros tramos educativos hasta la universidad, en los que las profesoras somos mayoría.

      Reivindicamos también nuestro derecho a una formación afectivo-sexual que nos enseñe en la diversidad, sin miedos, sin complejos, sin reducirnos a meros objetos y que no permita una sola agresión machista ni LGTBIfóbica en las aulas.

      Exigimos el mantenimiento y la ampliación de los programas de becas de estudio para las estudiantes de todos los niveles educativos.

      Denunciamos el presupuesto público que se destina a las escuelas gestionadas por el Opus Dei y a todas las escuelas concertadas que segregan por sexo. Reivindicamos una red de educación única, pública y gratuita y con perspectiva de género.

      Exigimos un avance en la coeducación en todos los ámbitos y espacios de formación y una educación que no relegue nuestra historia a los márgenes de los libros de texto; y en la que la perspectiva de género sea transversal a todas las disciplinas. ¡No somos una excepción, somos una constante que ha sido callada!

      ¡VIVA LA HUELGA DE CUIDADOS, DE CONSUMO, LABORAL Y EDUCATIVA!
      ¡VIVA LA HUELGA FEMINISTA!

      Ninguna mujer es ilegal. Decimos ¡BASTA! al racismo y la exclusión. Gritamos bien alto: ¡No a las guerras y a la fabricación de material bélico! Las guerras son producto y extensión del patriarcado y del capitalismo para el control de los territorios y de las personas. La consecuencia directa de las guerras son millares de mujeres migradas y refugiadas por todo el mundo, mujeres que estamos siendo victimizadas, olvidadas y violentadas.

      Denunciamos las políticas migratorias y de fronteras del Estado español y de la Unión Europea y exigimos la acogida de todas las personas migradas, sea por el motivo que sea, atendiendo al derecho a la movilidad humana. Denunciamos la opresión que sobre las mujeres trabajadoras migrantes tiene la actual legislación y las políticas públicas en la materia. Exigimos la derogación de la Ley de Extranjería. Exigimos el cierre inmediato de los CIE. ¡Somos mujeres libres en territorios libres!

      Denunciamos los recortes presupuestarios en los sectores que más nos afectan a las mujeres y LGTBI: el sistema de salud, los servicios sociales y la educación.

      Denunciamos la corrupción como un factor agravante de la crisis.

      Denunciamos la justicia patriarcal que no nos considera sujetas de pleno derecho.

      Denunciamos la grave represión y recortes de derechos que estamos sufriendo.

      Exigimos la recuperación de la memoria histórica y del protagonismo de las mujeres y de sus luchas así como mantener el recuerdo de las que ya no están: Verdad, justicia, reparación y no repetición.

      Reivindicamos la total separación entre la Iglesia y el Estado.

      Exigimos plena igualdad de derechos y condiciones de vida, y la total aceptación de nuestra diversidad.

      ¡NOS QUEREMOS LIBRES, NOS QUEREMOS VIVAS, FEMINISTAS, COMBATIVAS Y REBELDES!
      Hoy, la huelga feminista no se acaba:
      ¡SEGUIREMOS HASTA CONSEGUIR EL MUNDO QUE QUEREMOS!

  5. ¿Las convocantes se definen anticapitalistas? No.
    ¿Aparece la palabra ‘anticapitalismo’ en el manifiesto? No.
    Lo innegable es que el 8M y el feminismo representan el mayor movimiento social del país.
    Y, por eso, resulta incómodo para el ‘Partido Popular’ y para ‘Ciudadanos’, que reaccionan atacándolas e intentando ridiculizarlas para arrinconarlas en un espacio estrecho (la extrema izquierda), cuando su espacio no tiene límites…..

    • Claro, ya sabemos que también está el PSOE. Resulta incómodo reconocer que como empleador el PSOE resulta buen patrón. Y eso no es un ataque es una realidad.

    • No, en absoluto. No hay nada en el manifiesto que sugiera anticapitalismo. Más bien parece redactado por un liberal desorejado, misógino y miembro de los Legionarios de Cristo.

  6. En el Día de la Mujer nos proclamamos en deuda con aquellas mujeres que lucharon por conseguir la igualdad de derechos y deberes entre los sexos. También expresamos nuestra inquietud ante una corriente de opinión supuestamente feminista que pretende hablar en nombre de todas las mujeres, imponerles su forma de pensar y retratarlas como víctimas de nacimiento de lo que llaman el heteropatriarcado. Nosotras no nos reconocemos víctimas de nuestros hermanos, parejas, padres, hijos, amigos y compañeros, nuestros iguales masculinos. Nos rebelamos contra esa política de identidad que nos aprisiona en un bloque monolítico de pensamiento que niega la individualidad.

    La situación de las mujeres en España, según todas las estadísticas de organismos internacionales, es de las mejores del mundo, sin que ello signifique que no pueda mejorar. En la actualidad, hay más mujeres en la universidad que hombres, el fracaso escolar es mayoritariamente masculino, al igual que el suicidio, y la presencia femenina se hace cada vez más evidente en profesiones como la medicina, la judicatura, la Administración del Estado o los niveles más altos de la política. Además, nuestra expectativa de vida supera en varios años a la de los hombres.

    En la última década, sin embargo, coincidiendo con la entrada en vigor de la Ley de Violencia de Género, se ha instalado en el discurso predominante en los medios y en la política una corriente de pensamiento que presenta a las mujeres como víctimas por definición de una sociedad machista. El victimismo es un estado psicológico que conduce a la parálisis y nosotras no estamos dispuestas a perder la libertad, conquistada a lo largo de un siglo de lucha, por que nos quieran amilanadas.

    Subrayamos que nuestro país, España, es uno de los más seguros del mundo para las mujeres, con un índice de violencia de pareja comparativamente inferior a nuestro entorno, incluidos los igualitaristas países nórdicos. Llamamos a que la lucha contra la Violencia de Pareja sea siempre guiada por la evidencia científica más que por la ideología. Sólo así llegaremos a intervenciones sociales más eficaces para frenar la intolerable violencia contra las mujeres. Simultáneamente, no ignoramos a las víctimas masculinas de otro tipo de violencia, hombres y niños, y rechazamos la postura anticientífica que niega la agresión femenina.

    Celebramos la eliminación de las barreras para que las mujeres puedan colmar sus más altas ambiciones profesionales. Ahora bien, si las cimas más visibles de la la política y la empresa no están ocupadas de manera paritaria por mujeres no tiene por qué ser debido a la discriminación ni a la opresión patriarcal. La brecha de género en profesiones de ciencia y tecnología sigue siendo un desafío que requiere nuevos enfoques pedagógicos y respeto a las opciones de cada una de las mujeres. Aquí, como en todo, la mujer es libre para escoger, sin tener que ser un clon del hombre.

    El 8 de marzo conviene celebrar que la gran mayoría de las mujeres en España somos libres para elegir carrera profesional, trabajo y tipo de vida. Reconocemos la responsabilidad derivada de esa elección a la hora de decidir qué estudiar, quién escoge la jornada reducida o no en caso de ser padres, la duración del período de alimentación del lactante por la madre o cómo se organiza la conciliación laboral

    Proclamamos el derecho de nuestros hijos a saber que han tenido la inmensa suerte de nacer en un país donde existe el respeto a las mujeres y donde las niñas llegarán donde quieran. Porque ya lo han hecho. Porque ya hay rectoras de universidad, investigadoras, políticas, médicos, ingenieras, abogadas, escritoras, diplomáticas, periodistas, pilotos, empresarias o juezas. Desde hace décadas ha habido ministras, alcaldesas, presidentas de comunidades autónomas, del Senado, del Congreso, comisarias europeas y vicepresidentas del Gobierno. Obviamente, existe amplio campo de negociación en los hogares donde haya parejas con aspiraciones profesionales porque nadie —ni la mujer ni el hombre— puede tenerlo absolutamente todo. Se trata pues de consensuar mecanismos para aspirar a la mayor conciliación posible entre la vida familiar, la profesional y la estrictamente personal.

    Las niñas de hoy necesitan saber que ellas no son víctimas y que tienen su futuro en sus manos.

    Esa situación privilegiada de España, que destaca incluso dentro del mundo occidental, es uno de nuestros signos de identidad positivos como país. Según UNICEF, se estima que 133 millones de niñas han sufrido mutilación genital, sobre todo en Oriente Medio y en África. En Irán, hemos visto cómo se ha encarcelado a activistas por quitarse el velo. En Arabia Saudí, por fin, este año, las mujeres podrán conducir. Las tasas de maltrato en América Latina son aterradoras y en gran parte de África ni siquiera hay planificación familiar.

    Hace cuatro décadas que las mujeres en España dejaron de depender de los hombres para conquistar la igualdad. A muchas nos sobra el paternalismo y lamentamos que una ideología contraria a la libertad pretenda arrogarse la representación de la mitad de la humanidad y que se alimente de dinero público, de nuestro dinero, para fomentar una guerra de sexos que nos degrada y nos aleja de un futuro compartido.

    Celebremos el 8 de marzo que, a diferencia de otras partes del mundo, en España las mujeres no nacen víctimas. Que somos personas adultas, libres y responsables de nuestras elecciones.

    • Censor, han hecho un marketing cojonudo y el chantaje emocional impide que el análisis sea REALISTA.

      De todas formas, tarde o temprano la realidad se acaba imponiendo, y mañana aunque algunos lo sueñen, no se vota.

        • No, yo la tengo muy ancha y tengo memoria.

          Cuando mi mujer perdió el trabajo cuando se quedó embarazada, ni Estado ni femilist@s estaban ahí o para ayudar económicamente o para denunciar lo que le pasó a ella y le pasa a miles de mujeres todos los días.

          Lo importante es denunciar el hetero patriarcado, el capitalismo salvaje, la misoginia de la jerarquía católica, al Machirulo que come Caperucitas rojas…

Responder a Censor Cancelar comentario

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img