El persistente olor a chamusquina que está inquietando a los vecinos de Puertollano en los últimos días procede de las partículas arrastradas por el viento desde la planta de biomasa de Ence, en cuyo perímetro se declaró el pasado 28 de agosto un incendio que ha afectado a un gran volumen de material vegetal acumulado.
Si bien el incendio, originado al parecer por combustión espontánea, se dio por extinguido el 30 de agosto, puede seguir latente en menor medida durante días o semanas merced a un efecto «turba» que hace necesaria su vigilancia hasta que se consuma por si mismo.
Las fuentes consultadas recalcan que en todo caso la situación está controlada y no supone riesgo alguno ni para la planta ni para la población.
En las labores de extinción del incendio colaboraron más de treinta efectivos del servicio regional del INFOCAM, del Consorcio para el Servicio Contra Incendios y Salvamento de Ciudad Real (S.C.I.S) y del parque de bomberos de Puertollano, junto a personal propio de la empresa.
El fuego solo ha afectado a los montículos de restos leñosos para generación de biomasa allí ubicados y no ha habido que lamentar daños materiales ni personales.
En un comunicado remitido a los medios este lunes, la compañía asegura que el incendio se encuentra completamente controlado desde el mismo día en que se originó, y en las próximas horas estará totalmente sofocado y extinto, según las previsiones que trasladan a la compañía los equipos de profesionales que trabajan sobre el terreno.
Ence afirma que el incendio se originó por causas naturales: por la autocombustión de un acopio de paja, dadas las particulares condiciones del momento (temperaturas y fuertes vientos el día del incendio). «En cualquier caso, la planta cuenta con todas las precauciones para controlar este tipo de incidentes, conforme a la normativa que aplica en este tipo de instalaciones», subraya.
La empresa recalca que en todo momento se han seguido las recomendaciones de los servicios de bomberos. Atendiendo a sus indicaciones, la compañía ha dispuesto de todos los medios a su disposición para sofocar el incendio, así como para minimizar las posibles molestias causadas en el entorno de la planta.
«En todo caso, la compañía lamenta las posibles molestias causadas, que, no obstante, no entrañan riesgo alguno para la población. De hecho, la seguridad ha sido la principal prioridad para Ence desde el inicio de esta situación, que no ha supuesto riesgo ni para las personas ni para instalaciones», concluye.
