Dos alumnos del Colegio Salesiano de Puertollano se proclaman campeones de Europa con un proyecto de urbanismo sostenible

Cuando alguien se presenta a un concurso, no siempre se tiene la suerte de poder alzarse con el oro a nivel nacional. Sin embargo, dos alumnos de Salesianos Puertollano, José Manuel Olmo y Noel Rodríguez, se han alzado con el primer premio a nivel nacional en el proyecto Divaircity, y recientemente se han acreditado también como ganadores a nivel europeo de este proyecto, adelantando a los proyectos presentados por Italia, Dinamarca, Alemania y Rumanía.

El proyecto Divaircity, financiado por la Comisión Europea, procura hacer de los espacios urbanos un lugar más habitable, tanto en lo que se refiere a la reducción de temperaturas, como a la sostenibilidad de sus materiales y a la supresión de barreras que dificultan la habitabilidad de las ciudades para algunos ciudadanos.

Noel y José Manuel, relacionados con la Universidad Politécnica de Valencia, se propusieron aceptar un proyecto en el que tenían que reformar el área en la que se inscribe el “Casal Jove” de El Grao de Castellón, pudiendo haber aceptado reformar solamente el edificio. Sin embargo, no contentos con esto, se propusieron reformar también el acceso al centro de juventud citado, remodelando también el acceso por la calle de la Marina Española, adyacente al edificio. 

¿De qué manera pueden dos estudiantes de secundaria diseñar un proyecto urbanístico sostenible ecológicamente e inclusivo? Lo cierto es que nuestros jóvenes están familiarizados con el videojuego ‘Minecraft’, cuya función principal es la de la construcción de estructuras de modo autónomo a través de bloques cúbicos. Nuestros jóvenes se lanzaron a usar esta plataforma no solo por su familiaridad con el mundo de los videojuegos, sino también por la experiencia inmersiva que supone la construcción dentro de la dinámica del juego.

Entre las actuaciones efectuadas en el proyecto se prevén la sustitución del firme de la plaza frente al edificio, sustituyéndolo por zonas ajardinadas y adoquines de piedra pulida. Incluyen también fuentes dentro del proyecto, que refresca la atmósfera de la plaza. Incluso las terrazas de los bares son autoabastecidas por placas solares flexibles estratégicamente situadas para abastecer de electricidad al local. La climatización del local también se ve afectada en positivo gracias a que la cristalera del bar permite un buen aislamiento acústico y térmico, hecho de vidrio reciclado. También la salud física cuenta, pues han situado puntos para hacer calistenia, elíptica… estructuras comunes en nuestra localidad.

La accesibilidad a la plaza y al edificio se ve garantizada a través de rampas mecánicas y por diversos ascensores provistos de tejados verdes. El edificio del Casal Jove también es autosuficiente energéticamente a través de la tecnología solar, así como la instalación de iluminación, al ser LED. 

La calle con carril bici, pasarelas para garantizar la sombra y soterrando los contenedores para evitar ocupar hueco en la calle, también gestionando los lixiviados de la basura. Los jardines (y el huerto urbano del que se abastece el local de restauración de la plaza) se riegan con agua de lluvia acumulada a través de un sistema de aljibes. Todo ello puede contemplarse en la web del Proyecto (https://divaircity.eu/es/paneuropean-contest/), situado entre los proyectos remodeladores de Bucarest y de Orvieto.

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