La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha ratificado una pena de dos años de prisión para el vigilante de seguridad de una discoteca de Puertollano por un delito de lesiones con instrumento peligroso, al considerar probado que atacó a un joven con una porra tras expulsarle de una discoteca provocándole lesiones de consideración.
Los magistrados han desestimado así íntegramente el recurso de apelación formulado por la representación procesal del condenado contra una sentencia de diciembre de 2024 del Juzgado de lo Penal número tres de Ciudad Real.
Según consta en la sentencia, ha quedado probado, pese a las argumentaciones de la defensa del acusado, que este, sobre las 2.00 horas del 18 de diciembre de 2021, cuando desempeñaba su trabajo como vigilante de seguridad en la entonces conocida como discoteca «Sabana», en la calle Benéfica de Puertollano, se vio obligado a expulsar del local a dos varones y una mujer, al estar protagonizando una discusión.
Una vez en el exterior de la discoteca, tras comenzar una pelea entre uno de los expulsados y el acusado, intervino el otro hombre para que parasen, tras lo cual el vigilante, haciendo uso de su defensa personal, una porra, la emprendió a golpes con este último, propinándole un golpe en el ojo izquierdo, provocándole un corte en el pómulo, y acto seguido en el brazo, momento en el que acudió otra persona no identificada que también le golpeó. El perjudicado huyó a la carrera, hasta la llegada de los agentes de la Policía Nacional. La víctima padeció lesiones y secuelas de diversa consideración.
La Audiencia Provincial ha ratificado ahora la resolución en primera instancia, considerando al vigilante de la discoteca como autor criminalmente responsable de un delito de lesiones con instrumento peligroso y condenándole a la pena de dos años de prisión y a abonar al perjudicado, en concepto de responsabilidad civil, la cantidad de 2.104,45 euros más intereses.
Poco parece la condena.
Como funciona esto de que un vigilante no pueda realizar sus funciones ni usar su defensa la cual tiene autorizada, luego dicen que no hacen nada los vigilantes pero con casos así es mejor mirar para otro lado.
Creo que es mejor, montar la que se monta en la calle San Gregorio, de jaleo de niñatos, y que se jodan los vecinos, del mismo antro de siempre, y no pasa nada. Viva la libertad.
Los vigilantes y los policías tenéis que intentar dar besos, abrazos y caramelos cuando tengáis que reducir a los borrachos/drogados.
Un país sin justicia como es España, no es un país libre
Un vigiliante o un policía estan en su derecho, se esta convirtiendo en una ley nini y pronto llegara los del sigarrito
Lo normal en los garitos pijos donde se fomenta el alvise y esa calaña de ultraderecha.
Por tu comentario deduzco que perteneces a los que se llenan los bolsillos sin trabajar ni dar un palo al agua…
La ultraderecha a los garitos pijos y la izquierda a los puticlubs como buenos discípulos de la cúpula de gobierno….Puta vergüenza. A ese hombre había que darle una medalla no una sentencia!!!