Ciudad Real recibe a un descendiente del indio Gerónimo

La gente de cierta edad recordará aquellas películas del Oeste donde un peligroso jefe apache, llamado Jerónimo, se expresaba en un español rudimentario; en realidad, el rudimento provenía de la intención del doblaje. En la versión original en inglés de la famosa película <La diligencia>, su director, John Ford, hace que Jerónimo hable en español; sencillamente, porque aquellos apaches ya lo hablaban, y se habían sedentarizado tras la llegada de los españoles novohispanos a las tierras de más al norte.

Este gran jefe apache de la familia de los bedonkohe nació sobre 1829 en la Arizona actual. Su nombre indígena era Goyahkla, el que bosteza. Encabezó la resistencia apache contra los mejicanos y estadounidenses, principalmente contra estos últimos. En 1886 el general Nelson A. Miles urdió un plan para engañarlo. Le prometió que él y su pueblo podrían regresar a sus tierras ancestrales si se rendían. Tras la rendición, fueron hechos prisioneros y jamás regresaron a sus queridas tierras. No hay palabras para definir el trato dado al gran jefe: Lo exhibieron en ferias, enjaulado cual animal salvaje. Lo hicieron quienes se pavonean de existir para elevar las condiciones del resto de la humanidad; algo así dijo el presidente Mckinley tras recibir en bandeja Cuba, Filipinas, Puerto Rico y Guaján, hoy Guam, en 1898, de manos del gobierno vende patria de Sagasta, que montó un teatro bélico falso para justificar ante la opinión pública española la ignominia de la entrega de territorio español bajo la excusa de una derrota, que fue pactada. Aquel presidente aseguró haber tenido un sueño en el que la divinidad le pedía que sacara de la barbarie a filipinos, puertorriqueños y cubanos. Once años después (1909) el valeroso apache moriría cautivo, engañado, sin regresar a sus tierras, viendo cómo quienes habían nacido para elevar al resto del mundo: los casacas azules, acababan con pueblos que, como el suyo, habían convivido con los españoles desde tiempo atrás. Algunas reseñas históricas hablan de que a Jerónimo se le otorgaron ciertos privilegios ¿Puede considerarse así el pasearlo en una jaula de feria en feria?  Quizá la jaula tenía calefacción y aire acondicionado.  

El martes, 14 de Octubre, a las 18:00 horas, la asociación de Ciudad Real Legado de la Hispanidad presentará al descendiente de Jerónimo, D. Alfonso Borrego, en el museo López Villaseñor, calle Reyes 11. Lo acompañarán dos personas excepcionales por su experiencia vital y conocimiento: D. Jorge Carrera Robles (Director del INAH de Chihuahua, México) y Dña. Patricia Jiménez (Profesora de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, México)

En una reciente entrevista a un medio orensano, Alfonso Borrego afirmó: <España no debe pedir perdón por conquistar América, sino por haberse ido>

Marcelino Lastra Muñiz                                                                                                          

mlastramuniz@hotmail.com

Relacionados

3 COMENTARIOS

  1. César Vidal, tan lúcido para muchas cosas, en su afán por defender lo indefendible, ha llegado a decir que, el trato a los nativos de América del Norte fue tan exquisito, que se les concedieron licencias para casinos y se les ha eximido de pagar impuestos. Hay que tenerlos muy…

    Por demás, y en términos generales, afirmar que los hechos históricos acaecidos en la América Española fueron un genocidio y un expolio es mucho más falso que afirmar que el trato a los nativos fue cordial y se respetaron sus tierras y recursos. Al fin, allí siguen, en su inmensa mayoría, los primigenios pobladores de esas tierras y, los que más chillan contra España son (¡Oh, casualidad), criollos y vende patrias al servicio del imperio. Esos que mandan el oro de Argentina a Londres o quieren privatizar el petróleo de Venezuela para entregárselo a USA. La historia se repite…

  2. Que viva la hispanidad. Porque solo la unión es la fuerza que garantiza nuestro futuro.
    ABRAZA TÚ LIBERTAD AMANDO LA HISPANIDAD.

  3. Poco a poco descubro que ser hispanista no es mirar atrás con culpa, sino con gratitud. Es reconocer una historia que nos dio raíces, lengua y fe.

    Leer sobre Jerónimo me hizo pensar cuánto se ha distorsionado lo que fuimos, y cuánto nos falta por comprender.

    Hoy solo quiero aprender, escuchar y aportar (aunque sea un poquito) para que algún día podamos contar nuestra historia con verdad y orgullo.

Responder a Censor Cancelar comentario

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img