Almodóvar del Campo ejercía de anfitriona por vez primera a encajeras de toda la provincia, en la primera edición de un encuentro que hubo de trasladarse a cubierto debido a la lluvia pero que, con el buen ánimo y disposición de sus participantes y el gran hacer de las vecinas de la localidad, acabó por completarse una iniciativa por la que apuesta el Ayuntamiento para próximas ediciones.
Fueron 220 las personas participantes en total, llegadas de diferentes poblaciones como Argamasilla de Calatrava, Puertollano, Villamayor de Calatrava, Abenójar, Porzuna, etcétera y a las cuales se sumaron integrantes de la Asociación de Amas de Casa ‘Calatrava’ y participantes en el taller que se desarrolla anualmente en la Universidad Popular almodovareña.
La cita se iniciaba en torno a las diez de la mañana y se concentró en el salón del restaurante ‘La Mina’, ubicado en la Plaza Mayor donde inicialmente había quedado programada. Allí el recibimiento fue a base de chocolate con churros para, a continuación, iniciar la labor. La mañana se completaba con visitas de corte cultural y la agenda se cerraba con una comida de hermandad.
Virginia López, concejala de Cultura, se mostraba muy satisfecha con el desarrollo de este I Encuentro de Encajeras de Almodóvar del Campo, que el Ayuntamiento hacía realidad “tras la petición de muchas vecinas que suelen ir a otros y que nos pidieron hacerlo aquí, cosa que hemos hecho aun a pesar de la lluvia”.
La munícipe, que estuvo acompañada por su compañera Lidia Paz, encargada de la Concejalía de Asociaciones, reconocía el mérito de las encajeras porque “hemos visto cosas preciosas, unos pañitos, manteles y cosas extraordinarias que hacen, obras de arte y por lo tanto estamos muy contentas”.
López indicaba que, de cara a próximas ediciones, porque el Ayuntamiento va a seguir apostando por este tipo de convocatorias que entroncan con una tradición tan manchega como el encaje, se limarán los errores que han podido concurrir como consecuencia de la alteración del programa por las inclemencias del tiempo que, como es natural, “se nos van de las manos”.
Por su parte, en nombre de la Amas de Casa de Almodóvar del Campo, Dominga Ruiz, una de sus integrantes, mostraba la buena disposición de todas las participantes para una cita festiva que se pensó para estas primeras fechas de abril pensando en que reinaría el buen tempo. En todo caso, “nos hemos apretarnos un poquito, la gente se ha acoplado y hemos estado todas muy contentas”.
Balance también positivo para la monitora de la Universidad Popular, Jose Viñas, quien celebraba la mucha participación registrada. “Se ha volcado la gente para ser el primer año”, decía, en una experiencia que “nos permite conocer encajes de otros pueblos y afianzar amistades”.
