VOX presenta los 52 diputados que conformarán su Grupo Parlamentario

El presidente de VOX, Santiago Abascal, ha presentado este lunes a los 52 diputados que a partir del próximo 3 de diciembre conformarán el Grupo Parlamentario VOX en el Congreso de los Diputados.

Acompañado por los diputados Javier Ortega Smith, secretario general de VOX; Iván Espinosa de los Monteros, portavoz del GP VOX en la XIII Legislatura; Macarena Olona, secretaria general del GP VOX en la XIII Legislatura; Ignacio Garriga y Juanjo Aizcorbe, diputados electos por Barcelona; Lourdes Méndez y Teresa López, diputadas y cabezas de lista por Murcia y Ceuta, respectivamente, donde VOX ha sido la fuerza más votada, Santiago Abascal ha hecho un balance de cuáles serán las líneas generales a seguir en la próxima legislatura.

“Los 52 de Vox no sólo van a ser el dique de contención frente al separatismo, serán una garantía constitucional frente a las leyes liberticidas que el Gobierno quiera aprobar frente a cualquier intento de lesionar aún más la división de poderes”, ha asegurado.

Ricardo Chamorro (Ciudad Real)

Licenciado en Derecho por la Universidad de Navarra, Ricardo Chamorro ha sido abogado ejerciente por el Ilustre Colegio de Abogados de Ciudad Real hasta ser elegido Diputado Nacional de VOX en la anterior legislatura. Técnico en Comercio Exterior, especializado en Derecho Privado por el Consejo General del Notariado, Certificado por AENOR como Delegado de Protección de Datos, especializado en Derecho TIC.

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5 COMENTARIOS

  1. 52 diputados significan mucho y es una gran cabronada para el FrentePopular de Falconetti y el «mamadas» como lo llaman ahora.

    No habrá un gobierno de derechas, pero todo lo que planeen los progres si consiguen gobernar, y que suponga una reforma de la CE, se irá a hacer puñetas

    52 diputados significa que NINGUNA reforma constitucional podrá ser aprobada sin antes someterla a referéndum entre todos los españoles.

    Hay dos formas de reformar la CE:
    1.- La reforma agravada (o reforma «dura»): exige mayoría de 2/3, convocatoria de Cortes Constituyentes, elaboración de un nuevo proyecto de Constitución y, finalmente, aprobación de la nueva Constitución mediante referéndum.

    Esta vía es obligatoria para cualquier reforma que afecte a los derechos fundamentales o a los pilares básicos de nuestra Constitución (por ejemplo, una reforma para acabar con la Monarquía), debe hacerse por esta vía, por lo que jamás puede prosperar si el conjunto de los españoles no quiere.

    2.- La reforma ordinaria (o reforma «blanda»). Mayoría de 3/5 del Congreso (210 diputados), pero no hace falta convocar Cortes Constituyentes, ni celebrar un referéndum entre los españoles.

    Esta vía solo se puede aplicar si no afecta a los derechos fundamentales, ni a los pilares básicos del sistema.

    Y el asunto es que después del 11-M se puso en marcha el proyecto de destruir la soberanía nacional y convertirla en 17 o mas soberanías regionales (o lo que es lo mismo, una republiqueta de califatos y taifas)

    Obviamente, no podía llevarse a cabo mediante una reforma dura de la Constitución, porque el pueblo español jamás habría aprobado algo así en referéndum. Así que lo que se decidió, en su lugar, es confederalizar España por la puerta de atrás, mediante una reforma blanda, modificando solo el Título VIII de la Constitución, que es donde se define la estructura territorial autonómica.

    Intenciones había en el PSOE y en algunos programas del PP y de Ciudadanos de hacer eso, así que querían convertir la cámara alta en una cámara territorial, es decir, pasaría de que los españoles elegisiemos mediante votación directa a, aproximadamente, 2/3 de los senadores (y el resto por las CC.AA.) a que todos los senadores pasaran a ser designados por las comunidades autónomas y que ese nuevo Senado, controlado por las comunidades autónomas, tuviera derecho de veto sobre todo lo relativo a la estructura territorial del estado.

    Por lo tanto se habría «fusilado» la soberanía nacional, impidiendo a los españoles dejarían de poder decidir (a través del Congreso) lo relativo a la estructura territorial de España. El estado autonómico quedaría blindado y sería prácticamente imposible revertir esa situación.

    Y la ventaja para sus promotores es que no requería un referendum popular al poder hacerse por la reforma blanda. Pero hay una pequeña letra en esa reforma. Dice que si 35 diputados exigen someter la reforma a referéndum de todos los españoles, entonces hay que celebrar el referéndum obligatoriamente.

    Aunque puedan intentar llevar a cabo la reforma, VOX al tener mas de 35 diputados, podrá exigir que la reforma se someta a la aprobación de todos los españoles y por tanto, fracasaría ya que los españoles no aprobarían una reforma que quiera acabar con la soberanía nacional.

    Con 52 diputados, ha fracasado el plan progre de confederalizar España por la puerta de atrás. Ha fracasado el Golpe de Estado del 11-M y lo ha derrotado el pueblo español en las urnas.

    ¡Viva España!

  2. Eso de la » soberania nacional » se da, cuando el pueblo puede elegir a sus dirigentes para que gobiernen por un periodo de tiempo establecido.Pero si no es asi, y hay un » cargo » heredado al que no se puede acceder……quita el orgullo de tener soberania nacional……….y nos convierte en simples vasallos

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